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miércoles, 31 de mayo de 2017

El "crimen" de ser homosexual

Por G_nkerbell

La cifra de detenidos en Indonesia por el hecho de ser homosexuales alarma a las organizaciones de Derechos Humanos.

La Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas demostró su preocupación por la detención de de más de 150 hombres supuestamente gays en Indonesia en los últimos dos meses. Y es que a pesar de que en esa nación del sudeste asiático la homosexualidad es legal, excepto en la provincia de Aceh, cada vez se recrudece más la represión y persecución que sufren los miembros de la comunidad LGTB llegando incluso a sufrir la cárcel y castigos aún peores. Los más recientes hechos en que fueron detenidos al menos 140 hombres acusados de participar en una presunta fiesta homosexual en un gimnasio con sauna y servicios de spa, al norte de Yakarta, ha puesto la atención de numerosas organizaciones de derechos humanos del mundo en la forma en que se discriminan los homosexuales en ese país.

Las fuerzas policiales acudieron al local con la justificación de que se había organizado una fiesta que incluía desnudos y bailarines exóticos lo que viola la ley de pornografía de Indonesia, una parte de la legislación que castiga una amplia gama de comportamientos sexuales, por lo que los acusados podrían enfrentar penas en prisión o pagar elevadas multas. Algunos de los detenidos incluso fueron expuestos en Internet y en varios medios de prensa con los rostros cubiertos.  El portavoz del Alto Comisionado, Rupert Colville, indicó que según las normas del derecho internacional, todas las personas, sin excepción, tienen derecho a la protección de sus derechos humanos, incluyendo a las personas LGBTI. “El trato que sufrieron esos hombres en Indonesia violó múltiples normas de derechos humanos, como las relativas a la libertad, el juicio justo, la integridad, la intimidad, la dignidad, la igualdad ante la ley, la no discriminación y la prohibición absoluta de la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes”, dijo.

Por otra parte una coalición de grupos de asistencia legal que ayudan a los detenidos se pronunciaron en contra de la actitud del cuerpo policial y señaló que la policía había cometido violaciones adicionales a los derechos de los detenidos, entre los que se encontraban cuatro extranjeros: dos malasios, un singapurense y un británico, al fotografiarlos desnudos y facilitar la difusión de esas imágenes en medios sociales. Estos hechos se suman a los acontecidos en la ciudad de Surabaya, la segunda más grande del país, donde detuvo el mes pasado a 14 hombres en lo que las autoridades describieron como una fiesta sexual y les obligaron a pasar pruebas de VIH.

En los últimos años en los medios indonesios y entre personalidades de la política se ha generalizado un discurso marcado por la homofobia y la discriminación que ha calado profundo en algunos sectores de la población que, incluso, han creado grupos de búsqueda para personas con inclinación homosexual. El pasado día 24 un grupo de estas personas irrumpió en una casa de alquiler en Aceh, donde una pareja de jóvenes se encontraban teniendo relaciones, los filmaron y sacaron a la calle. Luego de ello fueron detenidos y condenados a flagelación pública. Este fue el primer caso en que se aplicaron las leyes Sharia en esa localidad que fueron aprobadas en el 2015 y que también son usadas para condenar el consumo y venta de alcohol, el juego y el adulterio y que muchas organizaciones temen puedan en algún momento generalizarse a lo largo de todo el territorio indonesio.

Estas muestras de intolerancia y discriminación se multiplican aún en varias regiones del mundo a pesar de los constantes reclamos de organizaciones sociales de todo el mundo. Indonesia se posiciona así junto a otras naciones como Rusia y Bangladesh donde en pleno siglo XXI la homosexualidad sigue siendo uno de los más terribles  "crímenes".