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miércoles, 14 de junio de 2017

Macedonia, dispuesta a cambiar su nombre con tal de entrar a la OTAN

Por Diana Santos

El secretario general de la Alianza Atlántica - la OTAN - Jens Stoltenberg, ratificó recientemente su apoyo incondicional a las intenciones de Macedonia de formar parte del bloque, destacando que las puertas de la OTAN continúan abiertas para el país. Las declaraciones fueron hechas en una reunión con el primer ministro macedonio, Zoraon Zaev. Parece que el sentimiento es recíproco, ya que Zaev está dispuesto a realizar todo tipo de concesiones con tal de lograr formar parte del club. Incluso está decidido a cambiar el nombre del propio país, uno de los motivos por el que siguen fuera de la Alianza debido a las protestas de sus vecinos sureños, los griegos. 

Aunque pueda tener su dosis de absurda burocracia, el hecho es que los helenos reclaman el derecho de autor, para decirlo de alguna manera. Este es también el nombre de una región ubicada al norte de su país, cuyo origen se ubica cerca del siglo VII antes de Cristo. Por este motivo los griegos están dispuestos a presentar reclamaciones territoriales en caso de ingresar al bloque sin hacer el cambio de nombre.

A Zaev le parece bien el nombre de Antigua República Yugoslava de Macedonia (FYROM, por sus siglas en inglés), cediendo a las exigencias de Atenas. Ante las posturas nacionalistas que se niegan al cambio, el mandatario alega que FYROM será un nombre provisional que servirá solo para entrar en el bloque militar. Sus planes contemplan que una vez que estén dentro, el tema vuelva a colocarse sobre la mesa en las negociaciones con Grecia. Pero… ¿sería así verdaderamente, o se convertiría este en otros de los asuntos históricos entre países? La salida al mar entre Bolivia y Chile, la independencia de las Malvinas y otros, demuestran que una vez tomada una decisión a niveles como estos resulta harto difícil revocarla.

Sin embargo, para expertos y analistas políticos el tema trasciende la simple tenencia de un apelativo. Si Macedonia acepta la medida, sería una muestra de debilidad y aptitud para ceder en muchos otros campos. Vecinos como Albania o Bulgaria podrían pronto enseñorearse también sobre el país. En este sentido, Zaev tiene menos temor al sacrificio que el gobierno anterior por tal de entrar a la Alianza. Aún el tema está por ver, aceptando incluso el mandatario, el cambio debe ser apoyado por la sociedad macedonia y el Parlamento del país, del cual se requieren al menos dos tercios de los votos, consultas con el Tribunal Constitucional y, en ciertos casos, hasta un referéndum nacional.

En el año 2008 Atenas impidió que Macedonia ingresara a la OTAN por el propio asunto. Y aunque insiste en la misma posición, muchos aseguran que 9 años después no está en condiciones de enfrentarse a la mayoría. Su deuda con Alemania es prácticamente impagable,y  ha demostrado incapacidad por oponerse a los Estados Unidos. A Grecia no le quedará más que ceder.