Adele cancela sus conciertos en Londres
La cantante británica Adele anunció este fin de semana a través de sus redes sociales que no podía estar presente en los conciertos que estaban planeados para el sábado y el domingo en Londres. Afirmó sentirse “devastada” por no poder cantar ante su público pero la intérprete sigue recomendaciones médicas ya que sufre de problemas con sus cuerdas vocales. Se trataba de los dos últimos conciertos que ponían fin a su gira mundial en la capital de Reino Unido por lo que la cantante llegó incluso a contemplar la remota idea de hacer playback por desesperación pero la descartó finalmente.
La vida del cantante puede ser muy bonita. Siempre de ciudad en ciudad, con público que anima y apoya, sentir su calor, que canten las canciones al unísono, llenar estadios, que todo el mundo quiera una foto con la estrella… Todas cosas bonitas que se ven truncadas en el momento en que cantar se vuelve una tarea complicada. Si la garganta de la cantante falla, las previsiones no son nada buenas. Es el caso de la británica Adele quien ya en ocasiones previas sus problemas vocales le han afectado a su carrera. Pero el último capítulo se ha producido este mismo fin de semana cuando, para tristeza de sus seguidores, la intérprete ha anunciado que los dos últimos conciertos que ponían fin a su gira mundial en Londres eran cancelados. De nuevo, un problema en su garganta le hace alejarse de los escenarios.
Ha sido la misma Adele quien, a través de sus perfiles oficiales en las distintas redes sociales, se ha encargado de comunicar la noticia y pedir perdón a sus fans. Los conciertos del sábado y el domingo en el estadio londinense de Wembley han tenido que ser cancelados, lo que ha supuesto un duro golpe para la cantante de 29 años que ha asegurado sentirse “devastada”. Tras acudir el viernes por la noche al médico, el especialista le recomendó dejar de actuar por los daños que pudiera ocasionarle para su garganta. Y es que la intérprete británica ya tuvo que pasar por quirófano en 2011 para someterse a una operación de cuerdas vocales. Y, tras haber congregado a casi 100 mil personas en las dos noches de actuaciones en Londres, anteriores al fin de semana; Adele forzó su voz exigiéndose “mucho más de lo normal”. “Estoy siendo tratada con muchos esteroides y otras ayudas para mi voz. Consideré la posibilidad de actuar el sábado, pero creo que ni siquiera hubiese sido capaz de acabar y, la verdad, no querría derrumbarme y dejaros tirados de esa manera”, asegura el comunicado. Además, la cantante no se olvida de dejar claro a sus seguidores que de no celebrarse finalmente los conciertos, el dinero sería devuelto a quienes compraron la entrada.
