Descubren grabados paleolíticos únicos en el País Vasco
En una cueva de Errenteria, denominada Aitzbitarte IV en la provincia española de Gipuzkoa, un grupo de espeleólogos descubrió imágenes paleolíticas que datan de hace aproximadamente 14.000 años. El descubrimiento que tuvo lugar el pasado mes de abril, ahora fue que se dio a conocer en San Sebastián. Los arqueólogos han explicado que la quincena de reproducciones encontrada está grabada en arcilla y posee un excelente estado de conservación, para ser bastante antiguas. Entre las imágenes se pueden observar animales como bisontes, caballos y cérvidos, así como también dos vulvas, midiendo una de ellas cerca de un metro de altura, para asombro de los expertos. Estos aseguran que son figuras únicas en España debido a la técnica utilizada en ellas.
Diego Garate, arqueólogo que ha participado en los hallazgos de Aizpitarte y de otras cuevas, dijo que las figuras podían haberse realizado en el Magdaleniense Medio, y que las mismas fueron modeladas en arcilla con "una técnica desconocida" en el país, pero que está relacionada con otros descubrimientos realizados en el Pirineo central, en el Ariège francés. Uno de los bisontes y otro animal aún por determinar fueron confeccionados a través de un buril de sílex, una herramienta punzante. Los artistas prehistóricos emplearon también los dedos para aportar volumen a las figuras y planos de relieve diferenciados sobre la arcilla, con el objetivo de destacar la perspectiva de las extremidades con gran minuciosidad.
Sin dudas lo que más puede llamar la atención del conjunto de reproducciones encontrado son las vulvas de diferentes tamaños. Sin embargo, no es la primera vez que entre las pinturas magdalenienses halladas en el País Vasco se encuentren vulvas en de uno u otro tamaño. Los expertos consideran que estas, al igual que en otras culturas de otras épocas históricas, guardan estrecha relación con fertilidad, el apareamiento y la sexualidad. Otros especialistas se arriesgan en asegurar que quizás estos lugares decorados con vulvas servían como espacios de encuentros entre grupos poblacionales escasos que no tendrían otra capacidad para relacionarse. Tanto las vulvas como las demás figuras de animales se han conservado tan bien, y llegado hasta nuestros días, gracias a la inaccesibilidad del lugar y a las condiciones estables de temperatura y humedad de la zona de la cueva donde se hallaron, que de este modo ha funcionado como un "frigorífico"
Luego de ser informado el descubrimiento al gobierno del País Vasco, las autoridades de Gipuzkoa han cerrado la cueva para evitar el deterioro de las figuras, que al estar hechas sobre arcilla, son muy frágiles. Hasta el momento son muy pocos los que han accedido a esta gruta, y que resumen a los propios artistas de los grabados, un topógrafo en la década del 90, y los espeleólogos y arqueólogos responsables de este hallazgo el pasado mes de abril. Estos últimos estudian hoy la mejor vía para realizar el análisis de esta galería, e incluso manejan la idea de utilizar perchas con cámaras o un dron.
