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jueves, 6 de julio de 2017

El adiós definitivo de Chris Bosh

Por Miguel

Los problemas de salud terminaron, finalmente, con la carrera del ala-pívot Chris Bosh en la NBA. Quien una vez fuera integrante del famoso Big Three (junto a Dwayne Wade y LeBron James) que condujo al Miami Heat a cuatro finales consecutivas, ahora pasará al retiro; aunque, junto con los dos anillos de campeón y los millones de dólares que ganó, le quedará el consuelo que el número que utilizó en el Heat, el 1, jamás volverá a ser utilizado en esa franquicia, reconoció Pat Riley, presidente del equipo.

El principal enemigo del talentoso jugador, de 2,11 metros de estatura, fueron los coágulos de sangre en sus pulmones. Estos aparecieron por primera vez en 2015 y se reprodujeron en 2016. Bosh nunca perdió la esperanza de volver a jugar, pero lo cierto fue que nunca pudo recuperarse. Un déficit de coagulación podría provocar una trombosis. Una muerte súbita, en el terreno, sería el peor escenario posible, así que, como es lógico, sin pasar el examen médico, el Heat no se iba a arriesgar.

 Al “cortarlo”, Miami libera del límite salarial establecido por la NBA (99 millones al año) los 52 millones de dólares que todavía debía abonarle, pero este dinero deberá ser pagado al exjugador durante los próximos cinco años (hasta 2022).

Bosh había sobresalido con los Raptors de Toronto, el equipo que lo seleccionó en cuarta posición en el draft de 2003 (ese mismo año fueron elegidos LeBron James, Dwyane Wade y Carmelo Anthony). En 2006-07, Bosh lideró a los Raptors a su primera aparición en postemporada y a su primer título divisional en la historia. En 2008 se unió al “Equipo de Ensueño” de Estados Unidos que triunfó en los Juegos Olímpicos de Beijing.

En 2010, Bosh tuvo una brillante temporada (su mejor) con Toronto, en la que promedió 24 puntos, con 7,9 rebotes. La llegada de “King” James al Heat, tras abandonar Cleveland, lo convenció de que valía la pena cambiar de aires, para buscar títulos desde el sur de la Florida. En la Final de 2011, frente a los Mavericks de Dallas, Bosh anotó el tiro ganador del tercer desafío, aunque el Heat terminó perdiendo, para sorpresa de todo el mundo, ante Dirk Nowitzki y compañía.

Inolvidable fue también el espectacular rebote ofensivo que capturó Bosh, en los instantes finales del sexto juego de la Final de 2013 ante los Spurs. De inmediato, Bosh pasó el balón hacia la esquina, desde donde Ray Allen lanzó el triple que empató el desafío y lo envió a tiempo extra. El Heat prevaleció en esta etapa y, luego, ganó el séptimo juego.

En Miami, probablemente muchos subvaloraron a Bosh y lo situaron siempre por detrás de James y Wade; pero lo cierto fue que sin el apoyo del zurdo, quien siempre fue muy hábil bajo los tableros, el Heat no hubiera dominado el Este por cuatro compañas en línea ni logrado los triunfos en las Finales ante Oklahoma City y San Antonio Spurs.

En total, Bosh disputó 13 temporadas en la NBA y en 11 de ellas fue elegido para participar en el Juego de Estrellas. Disputó 893 partidos, en los que anotó, como promedio, 19,2 puntos, capturó 8,5 rebotes, repartió 2 asistencias y un tapón.

¿Pudo llegar a más Bosh? Indudablemente. Su carrera estaba en la cúspide y, tras la partida de LeBron James, muchos esperaban que la dupla Wade-Bosh mantuviera al Heat en la zona de playoffs. Su retirada, aunque era esperada, tras conocerse los partes médicos, deja un vacío en una franquicia que trata de reconstruirse.