Enviar por email

tu nombre: email destino: mensaje:
Nombre de Usuario: Email: Contraseña: Confirmar Contraseña:
Entra con
Confirmando registro ...

Edita tu perfil:

Usuario:
País: Población: Provincia:
Género: Cumpleaños:
Email: Web:
Como te describes:
Contraseña: Nueva contraseña: Repite contraseña:

lunes, 17 de julio de 2017

Fallece la genio iraní de las Matemáticas

Por Eme

En 2014, la iraní Maryam Mirzakhani, se convirtió en la primera y hasta ahora, única mujer en recibir la prestigiosa medalla Fields, el equivalente en el mundo de las ciencias al Nobel de Matemáticas. Este reconocimiento se entrega cada cuatro años a entre dos y cuatro matemáticos menores de 40 años desde 1936, y tuvo que pasar todo ese tiempo, para que una mujer ganara ese premio. Solo con cuatro décadas, y con mucho que enseñar todavía en la Universidad de Stanford donde trabajaba, Mirzakhani falleció víctima de un cáncer de senos. Mirzakhani estaba casada con un científico checo, con quien tenía una hija.

Maryam Mirzakhani nació y creció en Teherán, en un Irán pos revolucionario, y desde su adolescencia ya se destacaba en el mundo de las matemáticas. En las Olimpiadas Internacionales de Matemática de 1994 y 1995, ganó sendas medallas de oro, y desde entonces marcó su rumbo, estableciendo investigaciones luego en los campos de la geometría y los sistemas dinámicos, sobre todo en el entendimiento de la simetría de las superficies curvas. En 2008 obtuvo un puesto como profesora de esta materia en la Universidad estadounidense de Stanford, pero antes se había doctorado en Harvard. En Stanford se radicó hasta que un cáncer de seno, que se le propagara a los huesos, terminó con su exitosa carrera y su vida a la corta edad de 40 años.

Su colega, el científico iraní-estadounidense, Firouz Naderi, al conocer la mala noticia se cuestionaba en Instagram: « ¿Un genio? Sí, pero también una hija, una madre y una esposa». Mirzakhani, al fallecer estaba casada con el científico checo Jan Vondrak, con quien tenía una pequeña hija. Naderi, quería significar más allá de su existencia, el triple rol que jugaba Mirzakhani, como mujer. Fue el propio Naderi, amigo de la exitosa investigadora, quien anunciaba así, su deceso en las redes sociales. «Hoy se apagó una luz. Me rompe el corazón…se ha ido lejos demasiado pronto», lamentaba Naderi.

Por supuesto, ante tamaña pérdida, desde su país natal no dejaron de lamentarlo. El propio presidente de Irán, Hasan Rouhani, dijo que la pérdida de Mirzakhani le ocasionó una gran pena. Mientras el ministro de Exteriores, Javad Zarif, dijo que la científica iraní era causa de dolor para todos los ciudadanos de ese país. Desde la Universidad donde era catedrática, Marc Tessier-Lavigne, presidente de la misma, calificó a la iraní como una brillante teórica de las matemáticas y además una persona humilde que aceptaba los honores solamente con la esperanza de que eso sirviera para estimular a otros a seguir su camino. «Maryam se fue demasiado pronto, pero su impacto seguirá vivo para las miles de mujeres a quienes inspiró a dedicarse a la matemática y a la ciencia. Sus contribuciones tanto como académica y como ejemplo a seguir son significativas y duraderas y ella será extrañada mucho aquí en Stanford y alrededor del mundo", agregó. Maryam era considerada una inspiración para las muchas jóvenes que siguen el camino de las ciencias exactas, y para quien la iraní era más que un material viviente de estudio. Cuando le dieron la medalla, no solo fue la única mujer en recibirlo, si no la primera iraní. Había sido una larga espera. 

Aunque es muy lamentable su pérdida, la idea de los más cercanos a la única mujer que poseía un equivalente a Premio Nobel de Matemáticas, sigue siendo aquella, de cuando la profesora Frances Kirwan, miembro del comité responsable de escoger a los premiados de la Universidad de Oxford, dijo por aquella época del lauro: «Espero que este premio inspire a muchas más chicas y jóvenes, en este país y alrededor del mundo, a creer en sus propias habilidades y a fijarse como objetivo ser las premiadas con la Medalla Fields del futuro». Un paradigma, en ello debe convertirse Maryam Mirzakhani.