La felicidad y el éxito en la mujer
Seguramente en muchas ocasiones te has preguntado cuál es la fórmula del éxito de las mujeres que admiras y por qué otras simplemente viven en las posturas de las circunstancias. La respuesta a esta interrogante suele ser algo provocadora y a su vez alentadora. El éxito no es gracias al destino ni viene como premio de hacer lo que todos esperan de ellas; tampoco es una dependencia su nivel de estudios o de por supuesto su cuenta bancaria, ¡la clave se encuentra en estar en sintonía consigo mismas, aceptarse sus defectos y de poseer una actitud tangible y positiva ante los retos que les plantea la vida! Se dice que todas estamos trazadas para ser felices y exitosas, pero es necesario llevar bien claro el significado de éxito para cada una. Un error que solemos hacer medirnos con los razones de éxito de otras personas, lo importante es descubrir que es lo que no gusta y hasta donde queremos llegar. La clave es no poner barreras en aquello que nos gustaría lograr.
Semejante a esas asombrosas mujeres, nosotras tenemos el talento para liberar las cadenas y dejar brotar la triunfadora que hay en nuestro interior. Dominar tus miedos y ejercer nuevos hábitos que te lleven a exceder tus límites y a sentirte más indemnizada y feliz, es uno de los primeros pasos para comenzar el maravilloso viaje hacia una vida llena de triunfo.
Creer ciegamente en una misma es uno de los aspectos fundamentales para triunfar en a vida. No cabe duda que una de los grandiosos caracteres de las mujeres exitosas es la autoconfianza; no se auto castigan ni les importa el qué dirán o lo que el resto de la gente envidiosa opine de ellas. Poseen un amor propio que conocen que conquistarán lo que se propongan por una escueta razón: confían ciegamente en lo que pueden hacer.
Inexcusablemente, una de las más grandes faltas que cometemos es dejar que nuestro censor interno dificulte nuestro éxito. En ocasiones somos nosotras mismas nuestros peores enemigos, debido a la forma en que solemos pensar de ciertas circunstancias. Esa forma de pensar la suelo denominar como el fatal huésped e u conciencia, e cual suele alimentar el disfavor reforzando nuestras inseguridades y dudas.
Huir del perfeccionismo es muy importante. En ciertas ocasiones perdemos tiempo y energía tratando de ser perfecta, esto solo nos conduce a un sentimiento profundo de desdicha e infelicidad. Las triunfadoras comprendemos que todo no lo podemos hacer bien todo el tiempo. Así que, no lamentarnos por los defectos, se trata de ser uno misma, una mujer e sangre por las venas perfectamente consciente de sus virtudes y defectos.
Actuar y dejar de pensar en el ambiente o el medio que nos rodea. Si tenemos un sueño, haz un método y esfuérzate por alcanzar la meta. El miedo muchas veces impide actuar, pero si algo te lo causa, abalánzate y sé valiente y busca apoyo e iluminación, sobre todo de otras jóvenes que hayan sido competentes de vencer obstáculos. Recuerda que las mujeres triunfadoras se exponen y están dispuestas a dejar su zona de comodidad.
Uno de los consejos más comunes a esta situación es ser más eficiente y productiva con el tiempo que pasas en tu quehacer diario. Enfocarse para evitar distracciones creando una lista de tareas para cumplir con todos tus objetivos de cada día. Es necesario dar prioridad a las cosas urgentes e importantes.
Definitivamente tus eres lo más preciado que posees, si no te cuidas tú, entonces nadie lo hará por ti. Por tanto surca tu mente y atiende tu alimentación; asiste tu cuerpo con respeto, goza de la comida con mesura. Ejercítate para aliviar el estrés, liberando endorfinas y aumentando la energía que necesitas para orientarte en tus objetivos y por supuesto en aquello que amas hacer.
