Messi tampoco se va del FC Barcelona
No hay manera de separarlo del club que creyó en él cuando su estatura dejaba mucho que desear y su corazón era un balón de fútbol. No existe mejor manera posible de agradecer los buenos y bellos gestos que siendo incondicional, y que un "hasta que la muerte nos separe" sea el lema entre Lionel Messi y el FC Barcelona. Por eso la Ciudad Condal está de fiesta. Por eso los fuegos artificiales se divisan desde el continente antártico y los seguidores del fútbol miran al cielo, respiran profundo y agradecen el saber que tendrán a su Dios por unos años más.
Messi renovó y dicen que el acuerdo será hasta el 2021 o 2022. La noticia trascendió con Leo de vacaciones y los detalles serán revelados en las próximas horas. No obstante, se conoce que usará el uniforme blaugrana por unos cuatro años y que su cláusula de rescisión subió hasta los 300 millones de euros. Sin dudas, un final feliz para el barcelonismo. Y es que muchos anhelaban la renovación, pero pasaban los días y el acuerdo no se plasmaba. Se trata de un pacto global en el que club y jugador ya tienen fijada la cantidad que percibirá el “10” durante su próximo contrato. Todo queda en cuestión de variables para cada temporada, apenas números que poco dicen para una realidad sobrada de alegría.
Desde mediados del pasado mes de abril, Jorge Messi, el padre del futbolista, viajaba a Barcelona para tocar el tema y mantuvo reuniones formales con Bartomeu en la que acercaron posturas, aunque no se cerraron temas importantes. Pero en las últimas semanas el presidente azulgrana tomó la velocidad de Usain Bolt y resolvió varios aspectos para decirle basta a los rumores y dejar claro que su gran estrella seguirá en casa. Es cierto, también, que ambas partes siempre se mostraron optimistas de cara a llegar a un acuerdo.
Así, luego de no pocos meses de noticias contradictorias, el formalmente esposo de la bella Antonella Roccuzzo continuará con los suyos. Incluso, el crack no firmará hasta que vuelva de las vacaciones, de su luna de miel junto a sus hijos. Todo se hará oficial, con firma incluida, cuando Messi regrese y se incorpore a los entrenamientos de pretemporada de Ernesto Valverde. Ya está casado. Ya no hay problemas con el fisco español. Ya no hay detalles en el aire. Ahora hay alegría, tranquilidad, sosiego, confianza. Hay, además, Messi para un buen rato, lo cual se traduce en calidad suprema, en alto nivel competitivo, en talento puro en la nómina del actual campeón de la Copa del Rey.
No es poca cosa contar cada mañana, en la cancha, con un tipo que es quíntuple ganador del Balón de Oro, que ha marcado 507 dianas en 583 partidos oficiales con tu elástica enfundada en el tren superior, y que, a sus 30 años de edad, muestra una óptima forma deportiva. Un niño que se convirtió en adolescente, luego en juvenil, después en hombre y hoy, gústele a quien le pese, es tu gran hombre, el más seguro de cara al gol.
