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miércoles, 5 de julio de 2017

Rusia y China no admiten el comportamiento de Pyongyang

Por Internacional Newsgur

El líder de Rusia, Vladímir Putin, y su homólogo chino, Xi Jinping, condenaron este martes el anuncio hecho por Corea del Norte sobre el lanzamiento de un nuevo misil balístico. Este llamamiento, firmado por los dos países, tacha de “inadmisible” este nuevo desafío del régimen de Pyongyang a la comunidad internacional y llama a llevar a cabo un proceso de pacificación en la zona. Así mismo, se insta también A Estados Unidos y a Corea del Sur a colaborar con el fin de los problemas y las actividades nucleares en el lugar. Un manifiesto que llega tan solo un par de días antes de que este fin de semana se celebre la cumbre del G-20 en Hamburgo.

Corea del Norte volvió a anunciar este martes el lanzamiento de un nuevo misil balístico. 535 kilómetros de altura alcanzó este misil que llegó a volar algo más de 510 kilómetros antes de caer sobre las aguas de Japón. Una noticia que ha sido calificada de “histórica” por el régimen de Pyongyang quien quiere demostrar así al mundo que su armamento puede llegar a cualquier parte del mundo según el país asiático.

Un nuevo desafío para la comunidad internacional quien, como en otras ocasiones, ha demostrado su descontento con la actividad nuclear y balística que está llevando a cabo Kim Jong-Un. El mismo martes, fueron Rusia y China quienes mostraron su negativa a las acciones de Pyongyand. Aprovechando la visita del presidente chino, Xi JInping, a Moscú, para la cumbre ruso-china; Vladímir Putin se reunió con su homólogo asiático para firmar un llamamiento a la pacificación en la zona que termine con esta serie de actos “inadmisibles”. Esta declaración entre ambos Ministerios de Exteriores tuvo por objetivo condenar el lanzamiento del misil así como la petición del cese de la península asiática como base de pruebas nucleares. En esta línea, no se instó solo a Corea del Norte a que pare sino también a los ejércitos militares de Estados Unidos y Corea del Sur. Pidieron una “congelación simultánea” de las actividades a la vez que alentaron a Pyongyang “con insistencia” a que respete las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.

“La posibilidad de recurrir a medidas militares para la solución de los problemas de la península de Corea debe ser excluida”, manifiesta la declaración en la que además se llama a las dos Coreas a iniciar conversaciones para “conjuntamente crear una atmósfera de paz y confianza mutua”. Así mismo, Rusia y China también dejaron clara su negativa a la instalación de los sistemas antimisiles estadounidenses en la zona del Noreste de Asia por perjudicar a los “intereses de la seguridad estratégica de los Estados regionales” y no ser un garante de paz y seguridad en el lugar.