Malala estudiará en Oxford
La prestigiosa casa de estudios británica ha aceptado en su matrícula a Malala Yousafzai, la joven paquistaní que con tan solo 20 años es conocida a nivel mundial gracias a sus campañas en favor de los derechos civiles, con énfasis en los derechos de las niñas. Malala fue gravemente herida hace cinco años debido a sus actividades que promueven el libre acceso de las niñas a la educación en su natal Pakistán, donde los talibanes lo han prohibido.
Una de las casas de estudios más prestigiosas del mundo, la universidad de Oxford, acogerá en su próxima matrícula a la conocida premio Nobel paquistaní, de 20 años, Malala Yousafzai. A principios de año, la activista por el derecho a la educación de las niñas reveló que había recibido una oferta para matricularse en una universidad del Reino Unido, que podría aceptarla solo si obtenía la máxima puntuación en tres asignaturas en sus exámenes previos, y así ha sucedido.
Vía Twitter, Malala publicó el mensaje que recibió del prestigioso centro académico británico confirmando su admisión, y afirmó estar muy emocionada al tiempo que envió sus mejores deseos a los demás estudiantes que como ella iniciarán estudios universitarios en Oxford. La nobel de la Paz pakistaní logró una plaza para el grado de Filosofía, Política y Economía.
Gracias a su campaña a favor de la escolarización de las niñas, sobre todo en zonas de conflicto, Malala fue galardonada con el premio Nobel de la Paz, en 2014, cuando tenía 17 años, de esta manera se convirtió en la persona más joven en recibirlo en cualquiera de sus categorías.
Su activismo se centra a favor de los derechos civiles, fundamentalmente en los derechos de las mujeres en el valle del río Swat, en Khyber Pakhtunkhwa, Pakistán, donde el régimen talibán ha vedado que las niñas tengan acceso a la educación.
Cuando tenía un poco más de diez años, Malala publicaba con frecuencia en un blog para la BBC sobre su vida que estaba mediada por la ocupación de los talibanes y sus muchos intentos para controlar el valle. Posteriormente The New York Times realizó un documental sobre ella, y así fue ganando en notoriedad. Como resultado fue nominada para el Premio de la Paz Internacional de la Infancia por el activista sudafricano Desmond Tutu.
La joven activista paquistaní tenía 15 años, en 2012, cuando un talibán le disparó tres veces apuntando a su cabeza en el autobús que la llevaba a la escuela en el valle de Swat, en su natal Pakistán. La agresión le provocó heridas graves, y fue perpetrada en represalia por haber liderado la campaña pública a favor del acceso de las niñas a la educación. Luego del incidente fue trasladada al hospital Queen Elizabeth de Birmingham, en el centro de Inglaterra, donde se quedó a vivir con su familia. Cuando se recuperó logró continuar sus estudios y activismo, haciéndose conocida en gran parte del mundo por pedir el acceso a la educación de los infantes en todos los países.
De 2013 a 2015 la revista Time incluyó a Malala en su lista de las 100 personas más influyentes del mundo. Y entre sus tantos reconocimientos destaca haber sido la primera persona en ganar el premio National Youth Peace Prize que en la actualidad lleva su nombre.
