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sábado, 19 de agosto de 2017

Se disparan los precios de hoteles en España hasta un 14%

Por Diana M.

Los datos del último Índice de Precios de Hoteles, que se realiza todos los meses y que analiza la variación del precio medio por habitación doble en los hoteles de las principales ciudades europeas, dan fe de que Los hoteles en España suben sus precios un 14%. Entre las ciudades objeto de estudio, las más caras para pernoctar en agosto son Palma (209 euros de media), San Sebastián (202), Barcelona (190), Santander (177) y Cádiz (174). Las más económicas, en cambio, son Lleida (56 euros), Murcia (61), Zaragoza (62), Badajoz (63) y Córdoba (63). Si comparamos con agosto del pasado año 2016, donde más han bajado las tarifas es en Santa Cruz de Tenerife (un 11% menos), Teruel (2%), Badajoz (1,6%), Córdoba (1,6%) y Cáceres (1,3%).

Siguiendo la misma línea de comparaciones, observamos el efecto contrario en  Castellón (con un aumento del 20%), Barcelona (20%), Gijón (18%), A Coruña (18%) y Santander (17%), siendo las ciudades donde más han subido los precios en un año.

En cuanto a comunidades autónomas, los precios medios más altos son los de Islas Baleares (231 euros), Cataluña (179), Cantabria (150) y País Vasco (148). En el otro extremo se encuentran Castilla-La Mancha (72 euros), Castilla y León (77), Extremadura (77) y Aragón (78) como las más baratas.

Ese incremento de precios no es exclusivo de los hoteles, sino que también se está produciendo en el caso de los apartamentos y casas vacacionales, incluso con mayor velocidad que en los hoteles. Según el portal inmobiliario Idealista, al cierre de 2016, los arrendamientos subieron de media en España un 15,9%. En algunos lugares como en Madrid y Barcelona los precios "se encuentran en máximos históricos, y las rentas son hoy un 4,2% y un 18,5% más caras que el punto álgido de la burbuja", detalla el portal.

A pesar de todo esto, la llegada de turistas extranjeros a España se incrementa. En 2016 llegaron 75,3 millones de viajeros y para este año se estima que se pueden alcanzar los 84 millones, incluso disputándole a Francia el título de destino más visitado del mundo. Hasta abril España recibió 20 millones de turistas, lo que supone un crecimiento del 11,6%. Y ese aumento desmedido de la demanda ha sido aprovechado por hoteleros y propietarios de casas y pisos para elevar las tarifas que van a cobrar.

Y no solo el alojamiento se encarece. En lo que va de año 2017 la mayoría de los indicadores del Índice de Precios del Consumo (IPC) vinculados a turismo y el ocio experimentan algún tipo de subida. Los restaurantes suben de media el 0,9%. Los vuelos nacionales, del 3,3%. Y los internacionales, del 0,4%. De momento, el único índice que parece a salvo del encarecimiento es la gasolina. Con la bajada del precio del petróleo, el litro de diésel valía esta semana 1,05 euros y el de gasolina, 1,18 euros. Es su precio más bajo en el año y dos céntimos menos que en 2016.

Todo parece indicar que tanto los turistas extranjeros como como los veraneantes españoles, de media, se encontrarán con precios más altos. “Los precios de los hoteles suben porque hay demanda. Pero no solo. España ya no busca competir solo en precios. Empieza a disfrutar de una especie de posición de monopolio en su entorno: muchos de los países con los que compite en sol y playa han sufrido incidentes peligrosos. Y España es segura”, dice Ricard Santomà, decano de la Facultad de Turismo Sant Ignasi, vinculada a la Universidad Ramón Llull.

Para Bruno Hallé, socio de la consultora especializada Magma HC, las causas son otras. Él defiende que la subida de precios tiene una justificación más allá de la demanda. “Las tarifas suben porque ha habido un reposicionamiento en muchos hoteles”, asegura. Muchos empresarios han apostado por invertir. Los fondos y las sociedades inmobiliarias se han lanzado a comprar hoteles. “No ha sido chapa y pintura. Este año se han hecho reformas de verdad en muchos establecimientos para subirlos de nivel”, asegura.