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viernes, 18 de agosto de 2017

Taylor Swift gana la batalla legal a su agresor sexual

Por Diana Lorenzo

Taylor Swift se ha convertido en un símbolo de fortaleza y justicia para las mujeres, finalmente ganó la batalla que desde el 2013 sostuvo contra David Mueller. El veredicto del jurado determinó que en efecto, la cantante fue víctima de abuso sexual por parte del ex locutor radial y DJ, cuando le manoseó el trasero en una sesión de fotos previa a un concierto en la ciudad de Denver. El dilema desde entonces se vinculó a una serie de demandas y contrademandas que 4 años después resultaron a favor de la famosa cantante de pop que exigió el simbólico pago de 1 dólar al culpable de asalto y agresión.

Como resulta evidente y confesado además por la Swift, su objetivo no era desfalcar ni destruir económicamente al acosador, se trataba más bien de defender un derecho que posee cada mujer, el del respeto y la integridad. Al respecto, dijo después del juicio:

“Mi esperanza es ayudar a aquellos cuyas voces también deberían ser escuchadas". A ello agregó que en un futuro próximo hará donaciones  a varias organizaciones que ayudan a víctimas de ataque sexual a defenderse a sí mismas. Desde la pasada semana se escucharon ecos del caso cuando el juez William Martínez, desestimó la demanda interpuesta por Mueller contra Swift, acusándola de haberla manoseado falsamente, y pidiéndole por ello tres millones de dólares de indemnización. Así mismo, el jurado concluyó que la madre de Swift, Andrea, y uno de sus guardaespaldas, Frank Bell, ambos demandados por Mueller, estaban en su derecho de reportar la agresión a la emisora en la que trabajaba el locutor (KYGO-FM) y de la que fue despedido en consecuencia.

Los hechos tuvieron lugar cuando la novia de David, Shannon Melcher, posó para tomarse una foto con Taylor, instante en el que según Swift, el DJ introdujo su mano debajo de la falda para tocarle. Él, como es de esperar sostiene su posición de inocencia:

"Lo que estoy diciendo es que no hice lo que ellos dicen que yo hice. No lo hice. Nunca la agarré. Nunca puse mi mano debajo de su falda y puedo pasar por un detector de mentiras". Según agrega, la foto no fue más que el producto de la rapidez y espontaneidad del momento: "No estaba listo. No me invitaron a la foto. Así que me metí en el cuadro lo mejor que pude".

 Dos días después del incidente, al DJ lo despidieron de su trabajo en la estación de radio KYGO como coanfitrión del show Ryno and Jackson. Fue este el motivo por el que dos años después Mueller demandó a la estrella, acusándola de que fue responsable de su despido. Sin embargo, la ganadora del Grammy contrademandó a Mueller un mes más tarde por asalto. La sentencia del tribunal expuso falta de evidencias y testigos a la causa de Mueller, para la mayoría un acto muy justo teniendo en cuenta su cinismo, al testificar que quizás tocó las costillas de Swift con sus nudillos durante el encuentro. "Como yo soy más alto, pensé que era buena idea si acercaba mi mano, para no tocar a Taylor con mis dedos", dijo en el estrado la semana pasada.

Pese a que su demanda fue desestimada, el abogado de David pidió 257.000 dólares en daños, el monto que le habrían pagado por su contrato con la estación KYGO si no lo hubiesen despedido.