Enviar por email

tu nombre: email destino: mensaje:
Nombre de Usuario: Email: Contraseña: Confirmar Contraseña:
Entra con
Confirmando registro ...

Edita tu perfil:

Usuario:
País: Población: Provincia:
Género: Cumpleaños:
Email: Web:
Como te describes:
Contraseña: Nueva contraseña: Repite contraseña:

lunes, 4 de septiembre de 2017

El peligro de los súper volcanes para la Tierra

Por Mayli

La NASA ha estado tras la caza de asteroides y cometas que puedan poner en peligro la sobrevivencia de la raza humana, pero ahora se ha concentrado en una amenaza más real e inmediata, la serie de 20 súper volcanes que en distintos lugares del planeta pueden hacer desaparecer buen parte de la Tierra y de sus habitantes. Bajo la apacible mirada de una tarde de aventuras en el Parque Nacional de Yellowstone, en Estados Unidos, se evidencia un enorme cráter con lava volcánica, que es en realidad un súper volcán, el mayor de cuantos existen, el más peligroso de todos.

Pareciera que el fin de la humanidad para la NASA solo vendría del exterior, y para predecir esto ha invertido millones de recursos, sin embargo ha encontrado que hay una amenaza mayor dentro de casa, y que se aleja de la teoría de los asteroides y cometas que reventarían la Tierra.

En el propio Estados Unidos, en el apacible parque de Yellowstone, hay un atractivo turístico natural que revela un enorme cráter con lava volcánica en su interior y que causa los géiseres y las aguas termales tan famosas de la zona. Realmente el cráter es la boca de un súper volcán, el más grande de la veintena que existe en el mundo, el mayor y más peligroso. Estos volcanes, tendrían enormes erupciones con estimados de tiempo, cada 100 mil años. Una erupción de estas pueden provocar lo que los científicos llaman como “invierno volcánico”, donde la nube de cenizas arruinaría los cultivos, cambiaría el clima y el acceso a una cobertura ejemplar de alimentación o salud estaría restringida. Y ya Naciones Unidas lo han avisado, las reservas alimenticias de la Tierra solo durarían 74 días. ¿Cómo los de la NASA pueden evitar una catástrofe así?

Yellowstone por ello ha cobrado mayor importancia para los científicos de la NASA. “Llegué a la conclusión de que la amenaza de un súper volcán es totalmente mayor a la de un asteroide o cualquier peligro externo”, dice el científico de la NASA Brian Wilcox. El calor que podría generar un volcán como el de Yellowstone es equivalente a lo que producen seis plantas de energía. En la actualidad del 60 al 70% de ese calor se filtra por las grietas de la cámara, y se marcha por los ríos de lava que tiene a su alrededor. Lo demás queda dentro y se acumula para producir más y más gases volátiles. Cuando este calor dentro llegue a un punto de no retorno, una erupción sería inevitable.

Como se puede evidenciar, si se lograra extraer más calor del que naturalmente sale del cráter, el súper volcán nunca podría entrar en erupción y ya este no representaría una amenaza. El problema es cómo se hace. Los de la NASA quieren enfriarlo de arriba hacia abajo, y para ello idearon un acueducto que bombeara una gran cantidad de agua diariamente hacia el interior del volcán. Pero la escasez de agua a nivel mundial y el costo de un acueducto pusieron en jaque su proyecto desde el inicio.

La otra opción sugiere perforar las entrañas del súper volcán y bombear agua a altas presiones, el líquido volvería a la atmosfera en forma de vapor, y así poco a poco el súper volcán se iría enfriando. Se gastarían miles de millones de dólares en esta empresa, pero se recuperaría la inversión usando ese calor como fuente de energía para la zona, válida hasta decena de millones de años, con un ahorro considerable. Claro que los riesgos de perforar el volcán podría también desencadenar la erupción que se busca prevenir. “Lo más importante es no hacer daño a la estructura del cráter del magma. La parte superior es intocable, lo que se perforaría serían los laterales, que están incluso fuera del parque Yellowstone”, dijo el científico. Para ver si el plan funciona o no, habría que esperar miles de años, así que los científicos que idearon el plan nunca verían sus resultados. Aunque sí estarían aliviados de salvar a la humanidad de una catástrofe.