La última canasta de Juan Carlos Navarro con España
Juan Carlos Navarro vistió por última vez el uniforme de la selección española de baloncesto. De seguro hubiera querido que su partido de despedida fuera en la discusión del título del Eurobasket 2017, pero Eslovenia impidió el adiós perfecto. Poco importa. España superó a Rusia, obtuvo el bronce del torneo y, de esta forma, “La Bomba”, el hombre que más veces ha defendido los colores españoles en certámenes internacionales (¡253 juegos!), añadió una nueva medalla, la última, a su impresionante palmarés, en el que se incluyen dos preseas plateadas olímpicas, una medalla de oro mundial y dos títulos de campeón de Europa, unido a todos sus triunfos con el club Barcelona. Casi nada.
“La Bomba”, como se le conocía por esa peculiar e irrepetible forma que tenía de realizar lanzamientos en suspensión y dinamitar los partidos, debutó con la camiseta española el 18 de agosto de 2000, en Granada, en un partido de preparación para la cita estival de Sídney. En ese momento, nadie pudo imaginar el impacto que tendría este jugador, uno de los mejores representantes de la generación dorada del baloncesto ibérico.
El primer título de Navarro con el uniforme de España llegó en el Mundial juvenil de 1999, celebrado en Lisboa. Allí, con 19 años, Navarro compartió equipo con otras figuras que, años después, llegarían a ser grandes estrellas, como Pau Gasol, un ícono del baloncesto español, dos veces campeón en la NBA, con los Lakers de Los Ángeles, y Felipe Reyes.
En 2006, Navarro fue figura clave en la obtención del título mundial, en Japón. En el duelo por la corona, los españoles pasaron por encima de Grecia y “La Bomba” anotó 20 puntos. Dos años después, disputó la final olímpica, en Beijing, ante una nueva versión del Equipo de Ensueño de Estados Unidos, que tenía a Kobe Bryant como principal estrella. Aquel fue un duelo cerradísimo, en el que los ibéricos cayeron 118-107 y Navarro anotó 18 puntos. En la siguiente cita estival se repitió la final y el duelo fue todavía más reñido, aunque volvió a favorecer a los estadounidenses, por 107-100. Su última aventura olímpica ocurrió en los Juegos de Río y allí España logró el bronce.
En los Eurobasket, Navarro tuvo una destacadísima actuación, ya que alcanzó dos títulos (en Polonia, 2009 y Lituana, 2011), dos medallas de plata y dos de bronce. Mejor, imposible.
La carrera de Navarro también está muy vinculada con el FC Barcelona. En ese club pasó por todas las categorías, hasta que debutó en el equipo principal, el 23 de noviembre de 1997. Ese día, en el Palau blaugrana, Navarro mostró cuán rápido podía penetrar al aro y su proverbial puntería. Anotó 10 puntos y dejó la mejor impresión.
Su historia con el Barça ha sido espectacular y las cifras lo demuestran: ha obtenido 2 Euroligas (en 2003 y 2010), ocho títulos de la liga ACB (1999, 2001, 2003, 2004, 2009, 2011, 2012 y 2014), 6 Copas del Rey (2001, 2003, 2007, 2010, 2011 y 2013) y 5 Supercopa de España (2004, 2009, 2010 y 2011 y 2015).
Navarro, al igual que la mayoría de los mejores baloncestistas españoles, probó suerte en la NBA. En 2007 firmó con los Grizzlies de Memphis, un equipo que, en ese momento, tenía en sus filas a Pau Gasol. Navarro solo estuvo una temporada y mostró, en la liga más fuerte del mundo, que él podía triunfar allí. Finalizó con 10,9 puntos como promedio, 2,6 rebotes y 2,2 asistencias, en 82 partidos. Tuvo la oportunidad de quedarse en Estados Unidos, pero desde Barcelona llegó una tentadora oferta económica, para su regreso y “La Bomba” unió el elemento sentimental con el dinero, hizo las maletas y volvió a la Ciudad Condal.
Su retiro de la selección nacional española ha provocado disímiles reacciones. El seleccionador Sergio Scariolo lo consideró una leyenda viva, mientras, Pau Gasol lo despidió con un emotivo abrazo, un gracias y un te quiero. Se va un grande del baloncesto mundial. La ausencia del capitán deja un vacío. Veremos quién puede llenarlo.
