¿Quién es la primera vicepresidenta en la historia de Uruguay?
La ex guerrillera, compañera de lucha y de vida del ex presidente José Pepe Mujica, es la nueva vicepresidenta de Uruguay. Tras la renuncia del Raúl Sendic, la hasta ahora senadora Lucía Topolansky se convirtió en la primera uruguaya que llega al cargo en el número dos de la política en su país natal. Los avezados ven esto como una oportunidad de presidencia que no pueden perder. Sus orígenes datan de cuando militaba por el Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros. Después ayudó a crear el Movimiento de Participación Popular en 1989 que se convirtió en la principal fuerza política del gobernante Frente Amplio.
Con la crisis creada por la renuncia de Sendic –acusado por conductas corruptas-, Topolansky fue la más votada y su grupo político también. Sus primeras palabras cuando asumió el cargo estuvieron dirigidas al actual jefe de Estado uruguayo, Tabaré Vázquez. Lo que lo voy a proponer se resume en una palabra: trabajo, aseguró la ex primera dama uruguaya.
La legislación uruguaya precisa que si el vicepresidente del país renuncia debe asumir el senador más votado de la lista política más votada. El Pepe Mujica fue el más votado pero como ya fue presidente no podía asumir.
La nueva vicepresidenta uruguaya estuvo presa durante 13 años. Con el seudónimo falso de Ana, la ahora vicepresidenta de Uruguay dejó sus estudios universitarios para unirse a la guerrilla de izquierdas.
Como muchos jóvenes de su generación que se levantaron contra los desmanes causados por las dictaduras cívico militares que operaron a sangre y fuego en las décadas de los 60, 70 y 80 del siglo pasado en América del Sur. Fue torturada, al igual que la ex presidenta de Brasil, Dilma Rousseff. Cuando salió de la cárcel junto a su compañero de vida José Pepe Mujica se sumaron activamente a la vida política uruguaya. Primero fue diputada y luego, senadora.
Como política tiene un avance en materia de ciencia y tecnología, agricultura y otros asuntos de índole social.
Es conocida dentro del mundo político uruguayo como “La Tronca”. Esto se debe a que es una palabra del argot uruguayo que se usa para referirse a alguien duro, con opiniones firmes y muy laborioso.
Uno de sus impulsos como parte del Frente Amplio fueron las normativas progresistas y de gran avance social tales como la legalización del mercado de marihuana, el aborto o el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Recién ocupó el puesto de vicepresidenta de Uruguay señaló que estaba enfocada en buscar una normativa para abordar la problemática de la violencia doméstica.
