Rusia tiende la mano a Cuba
Irma se alejó del Caribe, pero antes abrazó en un fatal abrazo toda la costa norte de la Mayor de las Antillas. Los últimos reportes del Consejo Nacional de la Defensa Civil en Cuba hablan de 10 fallecidos tras el paso del devastador huracán, que obligó a Trump a decretar el estado de desastre en la Florida, a donde continuó paso luego de sus estragos en prácticamente toda la infraestructura turística de la Isla, la capital, y numerosas ciudades del centro y oriente del país. No obstante, antes de que los vientos dejaran de soplar, el presidente ruso Vladimir Putin declaraba al mundo que Rusia estaba en completa disposición de ayudar a Cuba a contrarrestar las consecuencias terribles de los embates del feroz fenómeno meteorológico.
“Sí, estamos dispuestos”, ha dicho Putin como respuesta a una pregunta de un periodista cubano, al tiempo que especificó que el jefe del Ministerio de Situaciones de Emergencia ya había extendido la ayuda al país caribeño. Desde el mismo sábado, aún bajo los efectos de Irma en buena parte del país, las autoridades cubanas comenzaron a evaluar los daños dejados por el evento, que provocó fundamentalmente serias inundaciones costeras, y cuya fuerza de los vientos destruyó viviendas, derribó árboles y afectó numerosos cultivos.
Los cubanos estaban perfectamente informados de la potente fuerza del organismo, que antes de tocar suelo cubano por Cayo romano, ya había arrasado de forma masiva con la infraestructura de otras islas del Caribe como San Martín, San Bartolomé, las Islas Vírgenes, y Antigua y Barbuda, dejando además numerosos muertos.
De acuerdo con el ministro de Emergencias de Rusia, “nuestros rescatistas, técnicos y la unidad de respuesta humanitaria rápida están dispuestos a ayudar a los países afectados por el golpe de Irma en esta difícil situación", señaló a la prensa, mientras agregó que ya las propuestas a los socios extranjeros habían sido presentadas.
Rusia, sin embargo, no es el único país que ha ofrecido ayuda a Cuba, también lo ha hecho el gobierno boliviano, que según se ha informado ya está alistando un plan de contingencia para enviar ayuda humanitaria a los países afectados por desastres, tales como huracanes y terremotos, según lo anunció Reymi Ferreira, el ministro de Defensa. Aseguró en ese sentido que la política del Gobierno boliviano es obrar con reciprocidad hacia los países que han ayudado a Bolivia en situaciones de emergencia, y Cuba es uno de estos.
La solidaridad siempre es una buena noticia en medio de las imágenes de destrucción que Irma ha dibujado.
La noche del viernes, el ojo del Huracán Irma llegó a Cayo Romano, ubicado en el archipiélago de Camagüey -al norte de la Isla de Cuba, con vientos de hasta 260 kilómetros por hora y fortalecido en la mayor de las categorías de la escala Saffir-Simpson, la 5, algo que hacía varias décadas no ocurría, informó el Instituto de Meteorología de la isla (Insmet).
