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martes, 19 de septiembre de 2017

Sharapova habla de Serena Williams

Por Mayli

En julio de 2004, María Sharapova, en el espacio de una hora y dieciocho minutos, cambió su vida para siempre. Ese día entró en la cancha de Wimbledon como una desconocida de 17 años de edad y se marchó como una destaca atleta, que se volvería inolvidable. La precoz adolescente rusa con una sonrisa contagiosa había derrotado a la número uno del mundo y la entonces campeona reinante, la estadounidense Serena Williams. Con esa victoria en la final, la rusa Sharapova se convertía en la tercera mujer más joven de la historia en ser coronada campeona en Wimbledon, la Catedral del Tenis.

María Sharapova tocó el estrellato del tenis de muy joven, con solo 17 años, derrotando a la número uno del mundo, la norteamericana Serena Williams, nada más y nada menos que en Wimbledon, la Catedral del Tenis. Williams era el ejemplo a seguir, lo que había añorado la joven rusa, y le tocaba enfrentarla. Unos años después en entrevista televisiva, Sharapova recuerda todo lo que sucedió aquel día. "Recuerdo un momento con mi entrenador después de ganar los cuartos de final en Wimbledon. Estaba comiendo después del partido y mucha gente se acercaba a mí diciendo 'felicidades', y querían tomarse una foto conmigo. Simplemente me di cuenta de esta ola de gente que antes no conocía y también lo hizo mi entrenador. Él se acercó a mí inmediatamente y me susurró al oído algo que hoy no olvido”, dijo la tenista rusa.

Sharapova recuerda las palabras de su entonces entrenador, el ex tenista holandés Sven Groeneveld, vívidamente. "Está bien, las cosas están cambiando. Desde este momento, eres semifinalista en Wimbledon, tienes 17 años, tienes que ponerte las orejeras de los caballos para no desconcentrarte”, contó en el set Sharapova.

Y en efecto, todo cambiaría. Sharapova describe esa victoria como un momento clave en su carrera. Las promociones y acuerdos de patrocinio empezaron a llover, iniciando la marca Sharapova. "Mira, creo que Serena, en ese partido en particular, tenía más que perder en comparación conmigo. Quiero decir, yo era la que nunca había ganado nada, si perdía ese partido, sería la chica más feliz del planeta”, dijo unos años después. ¿En qué pensaba entonces? "¿Finalista de Wimbledon, quién hubiera pensado eso? Nadie esperaba eso de mí. Ella es dos veces campeona defensora, hay mucho más temor en su lado y creo que sentí eso. A medida que los torneos de Grand Slam van concluyendo y el número de jugadores disminuye, el vestuario se convierte en un lugar tranquilo y vacío."Te sientes como si fueras las únicas dos personas en el planeta", dice Sharapova, reviviendo ese momento íntimo. En su biografía, Sharapova describió lucidamente la manera en que oyó a Williams sollozar en el vestuario después de la final. Algo contado, que Williams nunca le perdonó a la rusa.

"Obviamente fue una derrota decepcionante para ella porque se esperaba que ella ganara. Estoy segura de que esperaba ganar ese partido, otra final de Wimbledon. Así que creo que de esa decepción en realidad, se le despertó algo, ella no quería perder ante mí de nuevo”, habla sobre sus sensaciones Sharapova. Y de hecho, desde 2004, a una carrera que se extiende a 13 años, nunca ha vuelto a ganarle a Serena. “Bueno, yo digo que ella es quien me puede, la que me domina”, admite sin contratiempos la actual jugadora de 30 años. “Las hermanas ya eran campeonas de Grand Slam en ese momento y sólo unos años más tarde, fue realmente como si alguien me tomara y me pusiera en una pantalla de televisión y me pusiera contra Serena Williams”, concluye la genio del tenis mundial.