Tras el Irma, Cuba va saliendo del caos
Los cubanos, con la tranquilidad de que el huracán María se alejará rumbo norte sin producir ningún desastre significativo en la Mayor de las Antillas, poco a poco van regresando a la normalidad luego del azote de la poderosa tormenta Irma, la cual dejó un sinfín de pérdidas económicas y también diez muertes. Solo dos semanas después del paso de Irma, el archipiélago, en sentido general, va saliendo del caos a gran escala, aunque todavía muchas son las afectaciones puntuales relacionadas con la electricidad, los servicios telefónicos y de agua potable, así como el fondo habitacional, sector en deterioro desde antes del ciclón tropical.
Pero a fuerza de voluntad y con mucho trabajo, Cuba se recupera del caos que representó Irma, uno de los temporales más fuertes que han atacado al Caribe en la historia. Miles de personas se han concentrado en el centro del país, región más afectada, para unirse a las tareas de reconstrucción y reparación de los servicios dañados. Allí ya se ha reestablecido el tránsito por los pedraplenes que unen la isla grande con Cayo Santa María y Cayo Coco, dos de los principales polos turísticos de la nación.
Desde Caibarién, en Villa Clara, y desde Morón, en Ciego de Ávila, ya se puede acceder a los cayos de la zona norte, un paso determinante para avanzar en la recuperación, pues esas son vías de comunicación más prácticas para el envío de materiales y de mano de obra. De cualquier forma, será difícil que dichos sitios logren remendar los múltiples destrozos provocados por Irma antes de que comience la temporada alta del turismo en Cuba, en el mes de noviembre.
A sabiendas de la complejidad de recuperar los cayos, las tareas de recuperación se han intensificado en Varadero, el célebre destino de sol y playa ubicado en la provincia de Matanzas. El mismo también sufrió daños importantes en su infraestructura hotelera, pero en menor medida, por lo que se supone que el flujo del turismo en Cuba se desviará notablemente hacia este polo hasta tanto existan las condiciones de alojamiento en los cayos, donde la disponibilidad será inferior.
Cuba también se ha recuperado en cuanto a las afectaciones eléctricas, pues ya más del 96% de la población cuenta con el servicio. Crucial en este sentido ha sido la reparación de la termoeléctrica Antonio Guiteras, ubicada en la costa norte matancera, la cual tiene un peso determinante en el Sistema Electroenergético Nacional. Allí, la casa de circulación de agua de mar sufrió graves daños, pero en muy poco tiempo, y luego de obras pesadas, se logró poner en marcha el centro.
Más tiempo demorará levantar miles de hogares que quedaron devastados, sobre todo en la zona central del país y en los litorales, donde el mar castigó con fuerza sobrenatural. En aras de ayudar a los más afectados, el Gobierno decidió financiar con el Presupuesto del Estado el 50 por ciento del precio de los materiales constructivos que se pondrá a la venta para los damnificados con destrucción total o parcial de sus viviendas.
