Conociendo los mecanismos de supervivencia del cáncer
El cáncer se vale de habilidades que sirvieron al embrión para crecer y formarse, y es tremendamente diverso y cambiante. Por eso, el avance médico para acabar con sus múltiples versiones en ocasiones es más lento de lo que nos gustaría. Los tumores están formados por células diferentes, por lo que muchas veces un fármaco funciona con unas células, pero con otras no. En ese sentido, se puede obtener una respuesta buena a determinado fármaco y luego el tumor reaparece por la heterogeneidad celular, puesto que es un mosaico de diferentes células con distintas sensibilidades al fármaco. A esto se le añade la capacidad del tumor para cambiar con el tiempo, para evolucionar, es un como un ser vivo, busca sobrevivir, se va adaptando al fármaco y genera resistencia.
En entrevista con el diario español El País, el director de Investigación Traslacional del Instituto de Investigación Valld’Hebron, Joan Seoane, explica que muchos de los sistemas de los que se vale el cáncer para conquistar el cuerpo humano,están presentes en los mecanismos necesarios para que un embrión se convierta en un ser humano. El cáncer se vale de habilidades que sirvieron al embrión para crecer y formarse, y es tremendamente diverso y cambiante. Por eso, el avance médico para acabar con sus múltiples versiones,en ocasiones es más lento de lo que nos gustaría.
Para que el embrión se desarrolle tiene que haber una proliferación celular masiva, algo que se da en las células tumorales, también debe darse la angiogénesis, que es la formación de vasos sanguíneos, como la que utiliza el cáncer para garantizarse recursos para crecer desde los vasos sanguíneos. Además, el embrión posee proteínas del padre, por lo que tiene que evitar que el sistema inmune de la madre lo ataque como a un cuerpo extraño, igual que lo que pasa en el tumor.
Para combatir las diferentes variantes del cáncer, que cambia de aspecto cuando se le ataca, Seoane explica que se han dado avances, si tenemos en cuenta que 40 años atrás se ignoraba casi todo sobre cómo funciona. Ahora, se conoce que no es una enfermedad sino centenares y podemos saber qué tiene cada paciente y empezar a tratar con medicina personalizada cada tipo de tumor concreto.
El tratamiento del cáncer es muy complejo, a pesar del esfuerzo de científicos y médicos de todo el mundo, pues cuando se habla de cáncer, estamos hablando de centenares de enfermedades, además, cada tumor es diferente y en cada paciente el conjunto de mutaciones del tumor es único, por lo que cada uno tiene que tener su propio tratamiento.
Los tumores están formados por células diferentes, por lo que muchas veces un fármaco funciona con unas células, pero con otras no. En ese sentido, se puede obtener una respuesta buena a determinado fármaco y luego el tumor reaparece por la heterogeneidad celular, puesto que es un mosaico de diferentes células con distintas sensibilidades al fármaco. A esto se le añade la capacidad del tumor para cambiar con el tiempo, para evolucionar, es un como un ser vivo, busca sobrevivir, se va adaptando al fármaco y genera resistencia.
En el estudio del cáncer y el desarrollo de métodos para combatirlos es muy importante el trabajo en equipo, pues hay que analizarlo desde todos los ángulos posibles y desde diferentes disciplinas para encontrar el talón de Aquiles que permita atacarlo, y la única manera de hacerlo es mediante equipos multidisciplinares.
El especialista añade que con el análisis de los tumores se genera una gran cantidad de datos. Actualmente están secuenciando los 3 mil millones de pares de bases que tenemos todos, en cada tumor y cada paciente. Eso produce una gran cantidad de datos, por lo que explica que hay una gran necesidad de estudio bioinformático de bases de datos.
En lo referido a las terapias alternativas el especialista considera que su uso es un problema real y reprobable, pues hay gente que ofrece tratamientos que no están probados e incluso llega al fraude en algunos casos. Añade que los fármacos que hoy funcionan se han generado mediante la investigación científica, y asevera que solo hay una manera de encontrar buenos tratamientos: ciencia, rigor científico, experimentación, ensayo clínico.
Sin embargo, pese a lo beneficioso de las investigaciones, se cierne sobre estas el fantasma de los elevados precios de los fármacos, que vienen dados también porque la investigación que da lugar a esos descubrimientos es cara. Actualmente, una de las ideas para solucionar esto es hacer que el precio sea dependiente del beneficio del fármaco. Por ejemplo, si un fármaco que erradica un tumor o te permite un aumento de la supervivencia de más de cinco años, fármaco tiene que tener un precio superior a uno que la aumenta tres meses.
