El puente de Cristal de China es solo para los más arriesgados
Como si no fuera bastante con encontrarse a 1 180 metros de altura sobre el nivel del mar, en un acantilado, caminando sobre un puente de cristal con suelo transparente; los creadores chinos han añadido a esta atracción efectos especiales. Para añadir, si es posible, más adrenalina y pavor, de pronto se sienten ruidos, crujidos y el puente se resquebraja. El parque donde está ubicada la nueva atracción turística abrió al público el 16 de septiembre pasado y los empleados han tenido que tranquilizar a los visitantes. Los gestores aseguraron que a los turistas se les notificará de la sorpresa que les espera en el camino y, en caso de que se produzca alguna grieta, el puente será cerrado de manera inmediata.
Esta es la experiencia que pueden vivir los turistas que se deciden a probar la última atracción de China, un puente de cristal con efectos especiales que simulan que se rompe a su paso, por efectos sonoros y visuales. El puente está ubicado en la provincia norteña de Hebei, en las montañas Taihang.
Y, a pesar de que la sociedad de ese país es aficionada a este tipo de atracciones de vértigo, este puente ha dado mucho de qué hablar, pues va un paso más allá. Por ejemplo, en imágenes difundidas por los medios oficiales, se ve un guía turístico seguido de un grupo de turistas y, de repente, se empiezan a ver grietas en la plataforma por la que camina, provocando sus gritos. El guía se tira al suelo, mientras otros pasan por su lado sin inmutarse. Se desconoce si las imágenes son una ficción o un relato real, pero se volvieron virales y han generado un debate sobre la seguridad en estas estructuras.
El parque donde está ubicada la nueva atracción turística abrió al público el 16 de septiembre pasado y los empleados han tenido que tranquilizar a los visitantes. Los gestores aseguraron que a los turistas se les notificará de la sorpresa que les espera en el camino y, en caso de que se produzca alguna grieta, el puente será cerrado de manera inmediata.
Dos años atrás, unas roturas en una pasarela de cristal de otro punto del país, ubicada a mil metros de altura, generaron pánico. En ese momento, las autoridades explicaron que los visitantes habían lanzado objetos, concretamente los termos que suelen llevar los chinos habitualmente con agua caliente o té, al suelo de vidrio, provocando la rotura. El incidente no fue más que un susto y no resultó herido ningún turista.
En los últimos años, en China ha habido un boom de este tipo de pasarelas ubicadas en sitios naturales que ofrecen una vista única a aquellos que no sufren de vértigo. En todo el país existen unos 60 puentes de cristal y hay planes para construir más, según datos del Global Times.
Uno de los más espectaculares está sobre el cañón del parque natural de Zhangjiajie, cuyo paisaje fue fuente de inspiración para el director David Cameron en el diseño de las montañas escarpadas del mundo fantástico de Pandora, en el filme Avatar.
En el 2016, se convirtió en el puente de cristal más alto y largo del mundo, con una longitud de 430 metros y 300 metros de altura, pero a los pocos días de abrir tuvo que ser cerrado temporalmente por su gran éxito, pues está pensado para soportar 800 personas a la vez y para un límite de 8 mil al día, pero se le acumularon visitas de 10 mil.
Según los arquitectos este tipo de puentes de vidrio con frecuencia son primariamente una novedad, edificada para atraer a visitantes, más que puentes para uso cotidiano de ciudadanos. El arquitecto Keith Brownlie, quien participó en la construcción del puente de vidrio del Museo de Ciencias de Londres, explica que el principal atractivo está en la relación entre la emoción del miedo y la comprensión lógica de la seguridad. Añade que esas estructuras recorren la frontera entre esos sentidos contrastantes y a la gente le gusta enfrentar su mente racional con su miedo irracional.
Por su parte, según el diseñador de puentes Ezra Groskin, los pisos de paneles de vidrio, usados en la creación de la arquitectura invisible, no son un fenómeno nuevo, pero su uso es restringido debido al costo y a cuestiones prácticas.
Sin embargo, los expertos cuestionan el uso de vidrio en ambientes montañosos abiertos. Según el arquitecto Adam Holicska, el uso del vidrio en un ambiente de montaña donde hay riesgo potencial de recibir el impacto de una roca puede hacerlo una elección cuestionable. Añade que un problema con las superficies de vidrio es el agarre, pues es resbaloso, por lo que deben preverse elementos antideslizantes.
