Gustar solo es cuestión de actitud
Cuando queremos agradar a alguien generalmente realizamos acciones conscientes o inconscientes encaminadas a lograr un grado de empatía. Sin embargo, con estos datos de investigaciones científicas y psicológicas, no es probable que falles en lograr una interacción agradable y amena entre aquellos que recién conoces. Trucos como adaptarse a los gestos que hacen los otros, tocarlos ligeramente o mantener una estado de ánimo de felicidad para influir en el ánimo de otros, son algunos de los resultados de estos curiosos estudios. Una recopilación del 'Time', plantea que aquellos que sigan estos consejos reforzarán las relaciones existentes y caerán bien a los recién conocidos en cuestión de segundos.
Los humanos somos seres sociales por naturaleza y buscamos agradar en los espacios en los que nos desenvolvemos, algo que influye también en nuestros estados de ánimo. Generalmente, nos agradan personas con afinidad hacia lo mismo que nosotros u otros elementos que podemos definir, pero a veces la empatía no es tan fácil de determinar. Es ante estas dudas que los científicos han pasado años buscando identificar los factores que ayudan a las personas a ser más atractivas ante los demás.
Aquí les presentamos algunos de los métodos infalibles para agradar a los demás, según una recopilación del 'Time', que plantea que aquellos que sigan estos consejos reforzarán las relaciones existentes y caerán bien a los recién conocidos en cuestión de segundos.
Copiar los gestos de la otra persona
En 1999, un estudio de la Universidad de Nueva York demostró la eficacia de tratar de copiar el lenguaje corporal, los gestos y las expresiones faciales de la persona con que se esté hablando. El truco está en reflejar sutilmente el comportamiento y lenguaje extraverbal de nuestro interlocutor.
Haberl@ visto con anterioridad
Un estudio de la Universidad de Pittsburgh indica que cuando hemos visto antes de conocer a la persona que nos presentan, esta no cae mejor. Para probarlo los investigadores le enseñaron a un grupo de personas, fotos de otras que habían visto con anterioridad. Esto dio como resultado que les parecían más atractivas aquellas personas a las que habían visto un mayor número de veces.
3. Mostrar emociones positivas
Según explica una investigación conjunta de las universidades de Ohio y de Hawái, las personas pueden sentir las emociones de aquellos que se encuentran a su alrededor de manera inconsciente. El artículo afirma que esto sucede pues, de manera natural, imitamos movimientos y expresiones faciales de otros, lo que influye en que empecemos a sentir emociones similares a las de los demás en ese momento. De ahí que si queremos que otros se sientan felices mientras nos conocen o están con nosotros, debemos tratar de transmitir emociones positivas.
4. Contacto físico
El contacto físico parece ser algo importante para lograr cercanía y agrado, pues según las investigaciones, las personas que tocan sutilmente a su interlocutor (ligeramente en la espalda, en un brazo, etc.), le caen mejor a la gente. Durante un experimento en la Universidad de Misisipi, se reveló que los camareros que tocaron por un instante la mano de los clientes, recibían propinas mayores que los que no recurrirían a este truco.
5. Presentar valores comunes
Un estudio clásico del psicólogo Theodore Newcomb, planeta que las personas se sienten más atraídas por aquellas que tienen ideas similares, lo que se conoce como el efecto de atracción por similitud. El experimento de Newcomb mostró que las personas con opiniones parecidas sobre temas polémicos, como política o religión, eran más atractivas las unas para las otras.
6. Ser cordiales y competentes
Psicólogos de la Universidad de Princeton desarrollaron un modelo de estereotípico para determinar cómo somos juzgados por la gente a partir de lo cordiales y competentes que somos. De acuerdo con el estudio, si alguien se presenta cordialmente inspirará confianza en los demás. Añaden que si luego la persona es capaz de demostrar que es competente, mostrando, por ejemplo, un alto nivel educativo o económico, infundirá respeto a los demás.
7. Revelar imperfecciones
El investigador Elliot Aronson, de la Universidad de Texas, plantea que a la gente le caen mejor aquellos que cometen errores insignificantes, pues revelar que no somos perfectos crea una imagen de mayor vulnerabilidad, pero también más fiable. Aunque esto funciona si sabemos demostrarnos como personas competentes con pequeñas imperfecciones.
8. Dejar hablar al otro
Investigadores de la Universidad de Harvard revelaron que hablar de uno mismo puede llegar a ser tan gratificante como el bienestar que se obtiene por la buena comida, el sexo o el dinero. Esto sucede ya que en el momento en que hablamos de nosotros, nuestro cerebro activa las zonas de motivación y recompensa. Esto es útil a la hora de agradar a alguien, pues lo complacemos dejándolo hablar de sí mismo, en lugar de contarle los problemas propios.
9. Contar un secreto
Un estudio de la Universidad de California señala que la autorrevelación puede ser una de las mejores técnicas para construir relaciones. Los investigadores descubrieron que aquellos estudiantes que compartían información personal y profunda se sentían más unidos que aquellos que no lo hacían.
