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sábado, 7 de octubre de 2017

La Casa Árbol, una escapada de lujo

Por Jacky

Las personas buscan en ocasiones refugios para escapar del ajetreo y el estrés de la vida diaria, incluso a lugares extraños o exóticos. Un ejemplo muy factible de esto es un refugio, ubicado en un bosque de las montañas de Almaty, en Kazajistán, donde el arquitecto Aibek Almasov, propietario del estudio de diseño homónimo, ha realizado un concepto para un retiro espiritual moderno lo más alejado posible del bullicio social, sumido en la calma de las altas bellezas naturales. El proyecto, conocido como Árbol en la casa, es un precioso y natural espacio cilíndrico de vidrio de cuatro pisos con un árbol encerrado en su interior para estar plenamente en contacto con la naturaleza y con un ambiente verde y sano.

En este mundo tan complicado, plagado de problemas, necesidades y mucho, muchísimo trabajo, todos necesitamos un refugio especial o un lugar alejado de los demás a donde podamos dirigirnos y escapar prácticamente de todas esas situaciones que nos rodean. Nuestro lugarcito del mundo que puede ayudarnos a meditar, analizar el próximo paso o simplemente reflexionar sin estar sumidos en la vorágine diaria siempre está en relación con nuestros gustos personales. Algunos prefieren la quietud y el aire nada viciado del campo o la montaña, otros prefieren acercarse a una playa y respirar el olor del océano. Todos tenemos preferencias particulares pero como siempre, algunas son más exóticas que otras, en dependencia de la personalidad de cada individuo.

Cada día la humanidad da muestras de los más impactantes y curiosos hechos, la inventiva actual ha llegado lejos en su intento de hacer cada vez más florido el estilo de vida de las personas y esas experiencias habituales de la vida, cada vez más bellas y novedosas. Múltiples son los estilos que han surgido en estos días para esas ocasiones especiales que se dan en la misma existencia, dígase de las graduaciones, los matrimonios, el nacimiento de un nuevo miembro de la familia o el bautizo de estos. Y también esos pocos momentos de relajación con los que contamos necesitamos a veces que tengan conceptos especiales.

El arte, la cultura y ¿por qué no?, también las últimas tendencias exóticas e impactantes se ponen de manifiesto últimamente en la mayoría de estos eventos. Así vemos sin escandalizarnos como actualmente una graduación escolar tiene el mismo estilo que un baile sacado de un cuento de hadas, como en una boda tanto la novia como las damas de honor van todas ataviadas de negro y con collares de afilados adornos metálicos, como un nacimiento puede darse por puro entretenimiento, en una isla desierta o incluso bajo el agua y como una persona se refugia en los bosques y se aleja completamente de la vida cotidiana, y así millares de hechos y costumbres que tienen cabida en esta cada vez más avanzada sociedad.

Y ahora también esas escapadas para recuperar la paz después de una temporada bastante agitada de trabajo, o de problemas de la vida diaria, también se realizan con mucho estilo y toques exóticos.

Un ejemplo muy factible de esto es un refugio, ubicado en un bosque de las montañas de Almaty, en Kazajistán, donde el arquitecto Aibek Almasov, propietario del estudio de diseño homónimo, ha realizado un concepto para un retiro espiritual moderno lo más alejado posible del bullicio social, sumido en la calma de las altas bellezas naturales. El proyecto, conocido como Árbol en la casa, es un precioso y natural espacio cilíndrico de vidrio de cuatro pisos con un árbol encerrado en su interior para estar plenamente en contacto con la naturaleza y con un ambiente verde y sano. Una escalera blanca enrollada permite a todos los visitantes ascender en esta casa árbol que tiene un estilo prácticamente salido de una película de ficción, con bellos paneles de vidrio que permiten observar el paisaje natural y a la vez aislarse de todo cuanto pasa alrededor.

La intención de esta natural estructura arquitectónica es lograr un maridaje entre el diseño industrial artificial y la naturaleza para un perfecto escape al ambiente de la montaña, y renunciar a algunas condiciones innecesarias de la vida en la ciudad. Su creador pretende ofrecer una alternativa a la bulliciosa vida cotidiana mediante esa unión de un hogar y un entorno natural sin crear una separación física de ambas categorías. La casa árbol tiene todo el lujo y confort necesarios para unas vacaciones impresionantes e inolvidables.