Enviar por email

tu nombre: email destino: mensaje:
Nombre de Usuario: Email: Contraseña: Confirmar Contraseña:
Entra con
Confirmando registro ...

Edita tu perfil:

Usuario:
País: Población: Provincia:
Género: Cumpleaños:
Email: Web:
Como te describes:
Contraseña: Nueva contraseña: Repite contraseña:

miércoles, 11 de octubre de 2017

La energía eólica más al alcance de la mano

Por erne91javier

Hay una oportunidad considerable de generar energía eólica en el océano abierto, particularmente en el Atlántico Norte, según un análisis que divulgan científicos de la estadounidense Carnegie Institution for Science. Producto a que la velocidad del viento es más extrema en promedio sobre el océano que sobre la tierra, las turbinas eólicas en el océano abierto podrían, en teoría, interceptar más de cinco veces más energía que las turbinas eólicas sobre la tierra. Esto presenta una atractiva oportunidad para generar energía renovable a través de aerogeneradores, pero no se sabía si los vientos oceánicos más rápidos podrían convertirse realmente en mayores cantidades de electricidad.

La mayor parte de la energía capturada por grandes parques eólicos se origina más arriba en la atmósfera y es transportada hasta la superficie donde las turbinas pueden extraer esta energía. Otros análisis han demostrado que existe una tasa máxima de generación de corriente eléctrica para los parques eólicos terrestres y concluyen que dicha tasa de extracción está limitada por la velocidad a la que la energía se mueve hacia abajo a partir de vientos más rápidos.

La verdadera pregunta es: ¿puede la atmósfera sobre el océano mover más energía hacia abajo de lo que es capaz la atmósfera sobre la tierra?, planteó al respecto el coautor de la investigación Ken Caldeira. Las sofisticadas herramientas de modelado compararon la productividad de los grandes parques eólicos de Kansas con los masivos y teóricos parques eólicos oceánicos abiertos y encontraron que en algunas áreas los parques eólicos oceánicos podían generar al menos tres veces más energía que los de tierra.

El estudio, en las Actas de la Academia Nacional de Ciencias, fue dirigido por la investigadora Carnegie Anna Possner junto con Ken Caldeira de la Carnegie Institution for Science en Stanford, California. En esta investigación, se analisan una supuesta explotación eólica de casi 2 millones de kilómetros cuadrados ubicada sobre los EE.UU. (centrada en Kansas) con otra situada en el océano Atlántico abierto. La idea de partida se presenta de forma compleja, ya que se debería cubrir enormes extensiones de mar con turbinas y encontrar la forma instalar y mantener los molinos en ambientes extremos. De hecho, hacerlo podría incluso alterar el clima del planeta, según han confirmado en la investigación. A pesar de esto, el mensaje es que la energía eólica en los océanos abiertos tiene un gran potencial y refuerza la idea de que los parques eólicos flotantes, sobre aguas muy profundas, podrían ser el siguiente paso importante para la tecnología de la energía eólica. "Consideraría esto como una especie de luz verde para esa industria desde el punto de vista geofísico", afirmó Caldeira.

Una de las conclusiones obtenidas es que cubrir gran parte de los EE.UU. con parques eólicos sería aún insuficiente para alimentar a los EE.UU. y China, lo que requeriría una capacidad de generación de unos 7 terawatios al año (un teravatio equivale a un billón de vatios). Sin embargo, el parque en el Atlántico Norte podría impulsar a esos dos países como mínimo. Los científicos descubrieron que la energía potencial que se puede extraer sobre el océano, en una misma área, es "al menos tres veces más alta".Se necesitaría una instalación eólica de más de 3 millones de kilómetros cuadrados –un área aún más grande que Groenlandia– sobre el océano para proporcionar las necesidades actuales de energía de la humanidad, o 18 teravatios, según el estudio. Por lo tanto, el estudio concluye que "sobre la media anual de consumo en el planeta, la energía eólica disponible en el Atlántico Norte podría ser suficiente para alimentar al mundo".

A pesar de estos datos obtenidos, estos son cálculos puramente teóricos al entrar en juego muchos factores prácticos. Entre ellos, el hecho de que los vientos no son igualmente fuertes en todas las estaciones, y que las tecnologías para capturar su energía a tal escala, y mucho menos transferirla a la costa, no existen actualmente.

Actualmente, la buena parte de la energía que necesitamos se adquiere de los recursos naturales como carbón, petróleo y gas natural. La necesidad de energía hace que se reduzcan estos recursos naturales en cantidades limitadas. Lo que hace importantes a los recursos de energía renovables es que son limpios. Los combustibles de fósil como petróleo y carbón desatan la contaminación ecológica exhalando gases nocivos. Esta contaminación, que ha llegado a una magnitud irrechazable en el día de hoy, amenaza el futuro de nuestra Tierra. El método más eficiente de luchar contra ello es usar los recursos renovables. Los recursos como viento y olas, que suministran energía sin límite, no hacen ningún daño a la naturaleza.

La energía eólica está siendo usada en muchas áreas desde hace miles de años. A lo largo de la historia, el viento era usado para moler el trigo y en los barcos de velo. En el tiempo presente, la energía eólica es usada para producir electricidad. Las turbinas de viento, que se instalan en los lugares de alta fertilidad eólica como franjas litorales, alta mar y valles, convierten la energía cinética en la electricidad. Este método, que no tiene un coste adicional de materia prima, asegura electricidad de una manera barata y limpia.