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viernes, 20 de octubre de 2017

No todas las niñas lo tienen fácil para estudiar

Por DianaLeon

Un informe de Naciones Unidas que examinó la calidad de la educación, determinó que más de 600 millones de niños que están en las aulas no están aprendiendo casi nada. Pero en las dificultades para acceder a la educación también influye el género. En muchos países lo que se espera para las niñas es que trabajen, básicamente en el hogar o cuidando de sus hermanos, en vez de ir a la escuela. Además, muchas se casan en la adolescencia, lo que elimina en gran parte las posibilidades de recibir una formación. Es por eso que, en lo que a logros académicos y calificaciones se refiere, mientras las niñas de los países occidentales ricos por lo general están por delante de los niños, aquellas que viven en los países más pobres tienen más probabilidades de acabar fuera de la escuela.

Los debates en las escuelas de los países desarrollados son frecuentemente sobre sus prioridades, como las asignaturas a las que se les debería dar más importancia, qué alumnos necesitan apoyo extra o en qué se necesita más presupuesto. Por su parte, para las familias de la mayoría de países en vías de desarrollo, las preocupaciones sobre la educación suelen ser tan básicas como si les será posible enviar a sus hijos a la escuela. En ese sentido, según datos de Naciones Unidas, en la última década hubo casi cero progreso para resolver el acceso a la educación en algunos de los países más pobres del mundo.

En adición, un informe de la misma organización, que examinó la calidad de la educación, determinó que más de 600 millones de niños que están en las aulas no están aprendiendo casi nada.

Pero en las dificultades para acceder a la educación también influye el género.En muchos países lo que se espera para las niñas es que trabajen, básicamente en el hogar o cuidando de sus hermanos, en vez de ir a la escuela. Además, muchas se casan en la adolescencia, lo que elimina en gran parte las posibilidades de recibir una formación. Es por eso que,en lo que a logros académicos y calificaciones se refiere, mientras las niñas de los países occidentales ricos por lo general están por delante de los niños, aquellas que viven en los países más pobres tienen más probabilidades de acabar fuera de la escuela.

En ese sentido, y con motivo del Día Internacional de la Niña establecido por la ONU el 11 de octubre, la campaña para el desarrollo One realizó una clasificación con los lugares donde es más difícil para las niñas obtener una educación.

De los diez países que encabezan el ránking, nueve se encuentran en África, y en estos es mayor el número de niñas que no asisten a la escuela que el de niños. Por lo general, son países con condiciones frágiles, donde gran número de las familias viven bajo el umbral de la pobreza, sin acceso a salud o a una nutrición adecuada, y también se ven duramente afectadas por desplazamientos motivados por guerras o conflictos.De acuerdo con la ONU, las pequeñas que viven en zonas de conflicto asumen el doble de posibilidades que los niños de perderse su educación.

Para realizar la lista se basaron fundamentalmente en datos del Instituto de Estadística de la UNESCO, empleando criterios como la proporción de niñas sin plaza en las escuelas primaria y secundaria, aquellas que completan ambos niveles, el número medio de las que acuden a la escuela, la tasa de analfabetismo entre mujeres, el nivel de los profesores de cada país, el número de alumnos por cada profesor o el gasto destinado a educación.

A partir de estos datos el primer lugar entre los peores países para ir a la escuela si se es mujer lo ocupa Sudán del Sur, donde la guerra y la violencia obligaron a las familias a abandonar sus hogares y además, destruyeron las escuelas. Le siguen la República Centroafricana, en la quecada profesor tiene como media a unos 80 alumnos a su cargo. Luego está Níger, donde el número de féminas alfabetizadas entre 15 y 24 años es solo del 17 por ciento. Por su parte, en el cuarto lugar está Afganistán, con una gran brecha de género y más niños en la escuela que niñas. Le sigue Chad, nación en la que los numerosos problemas sociales y económicos dificultan el acceso de las niñas a la educación. Continúa Mali, en donde solo el 38 por ciento de las niñas termina la primaria. El séptimo escaño fue para Guinea, en la que el tiempo medio de educación tomada por mujeres mayores de 25, fue de menos de un año. Luego viene Burkina Faso, en la que solo un 1 por ciento de las adolescentes concluye la secundaria. El noveno lugar fue para Liberia, con cerca de dos tercios del alumnado que debería estar estudiando en primaria, fuera de la escuela. Y el décimo puesto fue para Etiopía, donde 2 de cada 5 niñas se casan antes de los 18 años.

Por su parte, en los territorios latinoamericanos la situación según esta clasificación, es notablemente mejor. Haití, ocupó el puesto 30, y es el país peor clasificadode la región, en el que menos de la mitad de las niñas finalizan la escuela primaria.

Sin embargo, bien alejada de esta lista se encuentra otro país caribeño. Cuba, que es reconocido mundialmente por su modelo de educación y es calificado por la UNESCO como un ejemplo para el mundo, de acuerdo con los datos de One, es también el país que tiene los mejores indicadores del mundo sobre el acceso de las niñas a la escuela.Según los datos, el 99,7 por ciento de las niñas cubanas termina la educación primaria y el 86,4 por ciento la secundaria.

En general, con respecto a la problemática de la educación femenina, la presidenta de la campaña One, Gayle Smith, expresó que más de 130 millones de niñas están aún fuera de la escuela, lo que equivale a más de 130 millones de potenciales ingenieras, empresarias, profesoras y políticas cuyo liderazgo se está perdiendo el mundo.Para ella, el fracaso en la educación de las niñas es una crisis global que perpetúa la pobreza.