Yusuf, esclavizador y maltratador
La Policía italiana ha detenido a un residente de Sicilia -supuestamente oriundo de Marruecos- que sometió a una joven rusa a varios meses de esclavitud sexual, un periodo durante el cual la violó y la obligó a cumplir las costumbres musulmanas, reporta la agencia RIA Novosti. La ciudadana rusa -cuyo nombre y edad no se han revelado al estar todavía abierta la investigación- llevaba tiempo viviendo en el norte de Italia cuando empezó a hablar a través de WhatsApp con una persona que se presentó como Giuseppe D'Ignoti. Tras enamorarse de él, la mujer se mudó a Sicilia este mes de abril. Sin embargo, nada salió como ella esperaba.
Giuseppe resultó ser finalmente Yusuf, un hombre procedente, según asegura él, de Marruecos. La vida conjunta se convirtió rápidamente en un verdadero calvario: durante meses, el hombre golpeó, violó y amenazó de muerte a la joven. La mujer fue asimismo obligada a llevar hiyab, a rezar con él y a ver videos de ejecuciones de 'infieles'. La Policía señaló que Yusuf sentía orgullo de haber 'convertido' en musulmana a una mujer rubia con ojos azules. La joven no podía salir de la casa, pero este septiembre, tras una de las palizas, fue ingresada en un hospital, de donde logró huir. Al llegar a Turín, la víctima se dirigió a la Policía y denunció al maltratador. Yusuf está acusado ahora de esclavitud, violencia sexual, secuestro, trato cruel y abuso físico. Asimismo, se reveló que el hombre ya estuvo encarcelado entre 2010 y 2015 por haber ejercido un maltrato similar a su exesposa.
La esclavitud es una dura realidad para millones de personas en el mundo que se encuentran atrapadas en un sistema de explotación y abuso, compradas y vendidas como objetos, y tratadas sin dignidad ni decencia humana. Los grupos de protección de los derechos humanos estiman que de 12.3 a 27 millones de personas son esclavizadas en labores forzadas o servidumbre por deudas, trabajo de niños, servidumbre sexual y servidumbre involuntaria en cualquier momento. La esclavitud existe en una variedad de permutaciones, pero todas las formas de esclavitud comparten características comunes: los esclavos son forzados a trabajar; son propiedad o están controlados por otra persona; son deshumanizados y tratados como mercancías; y son forzados física y psicológicamente e incapaces de escapar.
Lamentablemente, esta práctica degradante es la actividad ilegal más lucrativa después del tráfico de drogas y de armas, y no es difícil imaginar porqué. Generalmente, cuando se comercializa con objetos, esos pueden venderse sólo una vez, en cambio, ¿cuántas veces se puede vender el cuerpo de una mujer? Algunas de ellas, son obligadas a mantener relaciones sexuales hasta 20 veces al mismo día. Debido a su naturaleza clandestina, es difícil determinar la magnitud de la esclavitud sexual. De hecho, se estima que el número de seres humanos que son víctimas identificadas de trafficking representa sólo el 4% del número total de todas las víctimas en el mundo.
Un tipo de esclavitud y explotación que prolifera a una velocidad alarmante-y que es de particular importancia para las mujeres y las niñas- es el tráfico/esclavitud sexual. El 79 % de la mayoría de tipos de víctimas de tráfico humano son mujeres y niñas. Y, el setenta y nueve por ciento de las víctimas del tráfico acaban siendo esclavas sexuales. Las Soroptimistas alrededor del mundo están trabajando para terminar con la esclavitud de las mujeres y las niñas. La esclavitud sexual es causada por la desigualdad de los géneros, la cual permite que la demanda por esclavos sexuales prospere-la creencia de que no hay daño en comprar los cuerpos de las mujeres y las niñas. Para poder terminar con la esclavitud, las Soroptimistas usan un acercamiento multi-dimensional que incluye elevar la toma de consciencia, asistir a las víctimas, prevenir que la esclavitud suceda desde el comienzo, y luchar por leyes mejores y su cumplimiento. La acción para terminar con el tráfico sexual empieza con entender qué es y por qué sucede. Por favor únase a Soroptimist en trabajar para terminar con la esclavitud de las mujeres y las niñas alrededor de todo el mundo.
La desigualdad de género es una condición esencial para la existencia del fenómeno de la trata de mujeres con fines de explotación sexual. Mientras que por un lado no haya una equidad en el acceso a los recursos y a las oportunidades por parte de ambos géneros, y se deje de ver a las mujeres como mercancías susceptibles de ser comercializadas o “consumidas”, la explotación sexual seguirá manteniéndose y destruyendo la vida de millones de mujeres y niñas.
