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martes, 7 de noviembre de 2017

El arroz podría cambiar la historia

Por G_nkerbell

Hay numerosas cuestiones que preocupan a la sociedad actual o al menos a esa parte que aún toma en cuenta los males que afectan a otros y que si no se toman acciones rápidas, se cobrarán cada vez más vidas. La hambruna por ejemplo, es uno de esos padecimientos actuales que se lleva a miles de personas a diario, la mayoría niños, sobre todo de países pobres. A pesar de las miles de campañas que se llevan a cabo desde Naciones Unidas para acabar con este problema que se extiende a numerosos lugares del planeta, los esfuerzos aún no son suficientes y millones de personas padecen día a día la crudeza del hambre.

Es por ello que como un mejoramiento para la industria alimentaria, la ciencia ha dado con una alternativa para ampliar los productos de que se dispone, y encabeza investigaciones que podrían suplir necesidades alimentarias actuales.

La carne cultivada en laboratorio, por ejemplo, comenzó siendo un impacto tanto por su estilo de creación como por sus exorbitantes precios, sin embargo, hoy representa una alternativa más para el desarrollo alimentario y podría estar llegar a las neveras de todas las personas en los próximo cinco años. Actualmente el proceso se ha adecuado a las exigencias y se ha ido adaptando y mejorando hasta llegar a precios módicos de hasta 10 euros, gracias a los resultados hallados por un equipo de investigadores holandeses.

Por otro lado, un equipo de científicos chinos han desarrollado una novedosa cepa de “arroz marino”, que según ellos, es súper resistente, se puede cultivar en agua salada y que está preparado para provocar una magnífica revolución en el cultivo de arroz, pues podrá alimentar a más de 200 millones de personas.

Ya desde la década de los 70, el investigador chino Yuan Longping fue uno de los primeros científicos en desarrollar variedades híbridas del arroz y en base al temor que supuso la teórica super expansión poblacional china en las siguientes décadas, él y su equipo crearon numerosas variedades de arroz que van desde crecer más rápido y rendir más hata resistir más estrés. Hoy en día, hasta el 20 por ciento del arroz del mundo proviene de estas especies de arroz creadas a través de su trabajo pionero en China.

Este nueva cepa de arroz hoy se ha logrado desarrollar a través de años de selección, cruces y análisis genéticos. De hecho, durante el verano pasado, los investigadores completaron sus primeros ensayos a gran escala en aras de cultivar en arrozales bombeados con agua de mar diluida con agua del Mar Amarillo, espacio de agua que existe entre China y la Península de Corea.

Luego del éxito en los experimentos, y a pesar de que es bastante más cara está producción, ocho veces más que el arroz estándar, ya han logrado vender seis toneladas y todo apunta a que la cifra vaya en aumento. Sin embargo, también se espera que el precio baje después de la comercialización amplia del producto. Además, se reducirá la necesidad de pesticidas, pues a los patógenos e insectos les resulta más difícil desarrollarse en esas concentraciones de salinidad tan altas.

El problema del arroz en China radicaba fundamentalmente en que enormes extensiones de campos chinos se han quedado vacíos debido a que el suelo y el suministro de agua es demasiado salino y alcalino. Aunque existen ciertas formas para que el arroz silvestre pueda sobrevivir a esta salinidad, generalmente tienen un rendimiento bastante pobre de entre 1,12 y 2.25 toneladas por hectárea. Sin embargo, esta nueva cepa híbrida se desarrolla completamente y puede producir entre 6,5 y 9,3 toneladas por hectárea. Este aumento en el rendimiento ya ha dejado claro que podría producir 50 millones de toneladas de alimentos, lo suficiente para dar comida a 200 millones de personas, según lo publicado en el South China Morning Post.