El Vaping, un riesgo para la salud
La industria tabacalera en los últimos tiempos se ha visto obligada a cuestionarse sobre los peligros del tabaquismo abofeteando advertencias espeluznantes en paquetes de cigarrillos, pero aún no ha sido arrinconado para dar tales renuncias sobre los cigarrillos electrónicos y otros productos de vapeo. Según los Centros para el Control de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), ahora es más probable que los jóvenes estadounidenses usen cigarrillos electrónicos que cualquier otra forma de tabaco. En 2016, más de dos millones de estudiantes de secundaria y preparatoria usaban cigarrillos electrónicos cada mes. Existe la percepción de que los cigarrillos electrónicos son inofensivos.
Aunque vapear es menos dañino que fumar cigarrillos comunes, estos productos no tienen riesgos. Los cigarrillos electrónicos son bastante nuevos y todavía estamos aprendiendo sobre sus efectos a largo plazo, pero parte de la ciencia es clara, y parte de ella está surgiendo con el tiempo.
La mayoría de los cigarrillos electrónicos contienen nicotina, la misma droga que se encuentra en los cigarrillos La nicotina tiene efectos dañinos conocidos: es adictiva, tóxica para los fetos en desarrollo y puede dañar el desarrollo del cerebro en niños y adultos jóvenes hasta la edad de 20 años. El aerosol del E-cigarrillo, como también se le conoce, puede dañar el cuerpo La sustancia que inhalan y exhalan los usuarios de cigarrillos electrónicos puede contener sustancias nocivas y potencialmente dañinas como la nicotina, los productos químicos y los metales pesados. Debido a que estos productos no están regulados, es imposible saber qué hay en un cigarrillo electrónico. Un estudio reciente, realizado por la Facultad de Medicina de la UNC y publicado en el American Journal of Respiratory and Critical Care Medicine de la American Thoracic Society, descubrió que los cigarrillos electrónicos no solo provocan las mismas respuestas inmunes que los cigarrillos normales; también estimulan respuestas inmunes únicas. Todo se reduce a cómo nuestros cuerpos procesan sustancias extrañas. El Dr. Pushan Jani, neumólogo del Memorial Hermann-Texas Medical Center y UTHealth, explica que cuando nuestros pulmones perciben que algo no está bien, nuestro sistema inmunitario se precipita para atacar. "El sentido común te diría [que vaping] lleva a la inflamación dentro del pulmón", dice el Dr. Cedric "Jamie" Rutland, un médico de cuidados críticos y pulmonares y profesor clínico asistente de la Facultad de Medicina de la Universidad de California en Riverside. Esta reacción puede ocurrir "incluso si solo fumas vapor de agua puro sin nicotina", dice Jani.
Los cigarrillos electrónicos pueden causar lesiones. No sucede muy a menudo, pero las baterías de los cigarrillos electrónicos han funcionado mal, causando quemaduras en las manos y la cara y otras lesiones corporales, algunas tan recientemente como el año pasado. Además, los niños y adultos han sido envenenados al tragar, respirar o absorber el líquido del cigarrillo electrónico a través de la piel o los ojos, de acuerdo con el CDC. Los sabores pueden apuntar a los muy jóvenes "La industria de aromatizantes es enorme y estos son productos químicos que se sabe que tienen una seguridad razonable cuando se comen y se exponen al tracto gastrointestinal, pero los pulmones son muy diferentes", dice el Dr. Robert Jackler, presidente de otorrinolaringología y profesor de otorrinolaringología en Stanford. . "Sabemos que en ciertos entornos industriales donde las personas los producen, son bastante peligrosos para respirar". Pero los riesgos desconocidos para la salud no son la única razón por la que el Dr. Jackler discrepa con el sabor de los cigarrillos electrónicos, también está preocupado porque entiende que parte del propósito de la industria tabaquera al anunciar sabores divertidos es atraer a los jóvenes.
El consumo de cigarrillos electrónicos ha aumentado entre los adolescentes en los últimos cinco años, y el sabor es un gran atractivo, con un estudio de 2016 que encontró que algunos adolescentes perciben que los cigarrillos electrónicos con sabor a frutas son menos nocivos que los que tienen sabor a tabaco. "La industria del tabaco quiere que la gente comience joven y sabe que lo que realmente los atrae son los sabores dulces y afrutados", dice Jackler. "Si todo lo que estaba disponible fuera tabaco amargo que podría ser repugnante". La Asociación Americana del Pulmón (ALA, por sus siglas en inglés) ha estado vigilando de cerca la atracción adolescente hacia el vapeo y está haciendo campaña por las mismas regulaciones federales para los cigarrillos electrónicos que existen para otros productos de tabaco. "Estamos tratando de alentar a la FDA a promulgar regulaciones de vapeo", dice Norman H. Edelman, asesor científico principal de ALA. "Ahora mismo es jurisdicción local".
