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martes, 14 de noviembre de 2017

La verdad de los casamientos forzados en Norteamérica

Por Miss GD

Una encuesta realizada por el Centro de Justicia Tahirih, organización sin ánimo de lucro que proporciona servicios legales y educación a mujeres y niñas inmigrantes que escapan de la violencia en Estados Unidos, afirma que efectivamente hay un creciente número de matrimonios forzados en ese país, sobre todo, entre las comunidades de inmigrantes. La encuesta demostró que comunidades de inmigrantes en la nación norteamericana, provenientes de países como India, Pakistán, Bangladesh, México, Filipinas, Yemen, Afganistán y Somalia, han participado en matrimonios forzados.Sin embargo la encuesta del grupo Tahirih, también halló conclusiones de sobre la comunidad estadounidense que indican que no es solamente un problema de los inmigrantes, sino que también existe de manera frecuente entre comunidades estadounidenses de no inmigrantes.

Estados Unidos es uno de los países menos esperados de la lista de aquellos que presentan números altos de matrimonios infantiles forzados. El problama radica fundamentalmente en que las excepciones a la ley que establece en 18 años la edad mínima para contraer matrimonio cson muy cambiantes en todos los estados del gigante norteamericano.

En la mayoría del país, el permiso de los padres o tutores, y la autorización de un juez, bastan para reducir esa edad en algunos años, dice Fraidy Reiss directora de Unchained at Last, organización que ayuda a mujeres y niñas a escapar de matrimonios forzados en Estados Unidos. En Nueva Jersey, por ejemplo, una de las excepciones a la ley más frecuentes y comunes es el consentimiento de los padres ante la unión marital.

Si los padres de los niños firman la aplicación de una licencia de matrimonio, la edad puede bajar hasta los 16 años, afirma Reiss. Y, según explica, ninguna entidad investiga si esos matrimonios son forzados y hasta qué punto. El consentimiento de los padres es problemático porque deja vulnerables a los niños a matrimonios no consentidos, advierte y refiere que incluso en una situación en la que una niña está llorando porque no quiere ese matrimonio, sus padres pueden firmar la solicitud de licencia de matrimonio y forzarla a casarse sin que nadie se entere y detenga el casamiento.

La autorización de un juez puede resultar incluso más problemática, indica Reiss, pues un juez básicamente puede reducir la edad mínima, sin limitación alguna, a cero. Cuenta que ellos en la organización han visto bodas de niños con adultos con diferencias de edades que podrían ser consideradas por las leyes estatales incluso como violaciones. Tal es el caso, en Nueva Jersey, en el que un niño de 10 años se casó con una mujer de 18, o una niña de 12 años que se casó con un hombre de casi 30, relata.

Con los datos que Unchained at Last tiene del estado de Nueva Jersey, se sabe que la mayoría de los 3.499 niños que se casaron tenían 16 y 17 años cuando se unieron, es decir que lo hicieron con la autorización de sus padres. Pero de ellos, los 178 que tenían entre 10 y 15, tuvieron que haber sido autorizados por un juez.

Hay también otros estados que permiten matrimonios de niños en caso de embarazo, refiere Reiss e indica que durante mucho tiempo ha habido una presión para tener hijos dentro del matrimonio, pues se supone que es en el mejor interés de la madre y el niño, pero se ha demostrado que no todo es así. Una niña embarazada defintivamente, no puede convertirse en una excepción de la ley, sino que debe ser protegida de un posible matrimonio forzoso, afirma.

De hecho, las madres adolescentes que no se casan, tienen una menor probabilidad a largo plazo vivir en la pobreza, porque la edad es un factor determinante en el fracaso matrimonial, dice. Y, según sus palabras, los niños tienen mucha más protección que las niñas contra los matrimonios forzados; para ellas la situación puede ser terrorífica, porque el matrimonio infantil mina sus posibilidades educativas y económicas y aumenta la posibilidad de que experimenten violencia. Múltiples casos de violaciones sexuales terminan con niños casados con su victimario a causa del embarazo, en lugar de que el violador vaya a prisión, manifiesta la experta.

Una encuesta realizada por el Centro de Justicia Tahirih, organización sin ánimo de lucro que proporciona servicios legales y educación a mujeres y niñas inmigrantes que escapan de la violencia en Estados Unidos, afirma que efectivamente hay un creciente número de matrimonios forzados en ese país, sobre todo, entre las comunidades de inmigrantes. La encuesta demostró que comunidades de inmigrantes en la nación norteamericana, provenientes de países como India, Pakistán, Bangladesh, México, Filipinas, Yemen, Afganistán y Somalia, han participado en matrimonios forzados.

Sin embargo la encuesta del grupo Tahirih, también halló conclusiones de sobre la comunidad estadounidense que indican que no es solamente un problema de los inmigrantes, sino que también existe de manera frecuente entre comunidades estadounidenses de no inmigrantes.

También hay que destacar que Unchained at Last es la única organización en Estados Unidos que tiene la misión específica de ayudar a mujeres a escapar o evitar matrimonios forzados.