Los alemanes se movilizan contra la extrema derecha
Los grupos de derechos civiles alemanes se están movilizando contra el partido de extrema derecha elegido recientemente por la Alternativa por Alemania (AfD) y otros grupos más duros, y se han comprometido a evitar el golpe de derecha aún más fuerte que se observa en los países vecinos. Se esperan miles de manifestantes en la ciudad oriental de Dresde el sábado cuando el movimiento anti-Islam PEGIDA celebra su tercer aniversario. PEGIDA - Patrióticos europeos contra la islamización de Occidente - ha visto una disminución de la multitud desde principios de 2015, con el AfD absorbiendo a algunos de sus seguidores.
El AfD ganó casi el 13 por ciento de los votos en las elecciones nacionales del 24 de septiembre, convirtiéndolo en el tercer partido más grande en el Bundestag o cámara baja del parlamento, y el primer partido de extrema derecha en ganar escaños en más de medio siglo.
Las encuestas de salida mostraron que el 60 por ciento de los votantes de AfD emitieron un "voto de protesta", y muchos se enojaron con la decisión de la canciller Angela Merkel de permitir el ingreso de más de un millón de inmigrantes, principalmente musulmanes.
Los expertos dicen que el ascenso de la fiesta también es parte de una tendencia global que ha llevado a los partidos o líderes de derecha al poder en Polonia, Hungría y, más recientemente, Austria.
Los principales partidos de Alemania han dicho que no trabajarán con el AfD a nivel nacional, pero los activistas dicen que deben demostrar una clara resistencia a los comentarios de AfD sobre el Islam y otros asuntos en el parlamento, y 14 de las 16 legislaturas estatales.
"Hemos visto un fuerte y creciente movimiento de personas que se resisten al AfD en los últimos meses en las grandes ciudades, en las ciudades pequeñas, y ahora necesitamos ese movimiento a escala nacional", dijo Nora Berneis de Aufstehen gegen Rassismus, o de pie contra Racismo.
El grupo planea una gran protesta en la ciudad norteña de Hanover el 2 de diciembre cuando el AfD se reúne para una conferencia del partido.
El partido ha recibido fuertes críticas de un grupo de periodistas alemanes por buscar datos sobre los antecedentes étnicos y las opiniones políticas de los periodistas que quieren cubrir la conferencia. Christoph Schott, del grupo activista global Avaaz, dijo que más de 500,000 personas habían firmado una carta abierta al AfD, rechazando los mensajes "xenófobos" y "racistas" del partido. El AfD critica lo que llama la "islamización de Europa" y niega que sea racista.
Comenzando con los esfuerzos de "reeducación" de los Aliados después de la Segunda Guerra Mundial, Alemania ha desarrollado un intenso programa de educación cívica. El gobierno duplicó la financiación de proyectos dirigidos a combatir el extremismo de derecha, izquierda e islamismo a más de 100 millones de euros solo en 2017. Algunos acreditan esas políticas para mantener el apoyo a los partidos de extrema derecha más bajos que en los países vecinos.
Pero Axel Ruppert, de la Red Europea contra el Racismo, dijo que la retórica agresiva del AfD estaba presionando los límites del discurso "aceptable" y los crímenes de odio estaban aumentando. Los datos de la policía mostraron un aumento del 14 por ciento en los actos violentos de los extremistas de derecha en 2016, y los crímenes antisemitas aumentaron un 4 por ciento a 681 en los primeros ocho meses de 2017.
La entrada del AfD en el parlamento ha desencadenado un diálogo largamente esperado sobre lo que salió mal durante la unificación de Alemania oriental y occidental en 1990, dijo Michaela Glaser con el German Youth Institute, una asociación de investigación sin fines de lucro. "Un rayo de luz ... puede ser que las cosas que estaban ocultas antes se hayan vuelto visibles. Y solo si algo se ha articulado puede abordarse ", dijo.
