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viernes, 3 de noviembre de 2017

Los celos afectan a nuestro cerebro

Por Diana M.

Los celos constituyen una respuesta emocional sobrevalorada de los seres humanos, en el cual juega un papel primordial el medio social y el ser amado. Generalmente los celos llevan aparejados sentimientos de furia, envidia, posesión y egocentrismo por quienes lo padecen, pudiendo conducir en ocasiones, hasta la ejecución de actos violentos.

En este sentido, expertos de la Universidad de California, emprendieron una investigación en un grupo primates monógamos conocidos como Titis, la cual tuvo por objetivo comprender desde una perspectiva biopsicosocial, los sustratos de esta emoción, así como sus consecuencias deletéreas para el cerebro.Según Karen Bales, principal científica encargada del estudio, se encontró una fuerte asociación entre los celos y el lóbulo frontal. Además, de una acelerada actividad de la corteza cerebral, en diferentes áreas asociadas con el dolor social y el apego a la pareja; fue Frontiers in Ecology and Evolution la encargada de entrevistar a la brillante galena.

Para la selección de la muestra fueron reunidos una serie de animales; siendo los monos cobrizos los escogidos debido a los lazos estrechos que mantienen durante sus vidas con sus homólogas. De acuerdo con la investigación, los Titis son especies con una gran cohesión, que al igual que los humanos, muestran sensaciones de angustia ante la separación de sus parejas y se manifiestan celosamente ante la presencia de un nuevo primate.

Pese a los resultados conseguidos, Bales anunció el largo trecho aún por recorrer, debido al carácter evolutivo de la monogamia y las limitaciones descubiertas; pues la investigación solo indagó en la actitud asumida por los machos frente a sus compañeras, pero no los efectos de asociados a la corteza cerebral femenina. Si lugar a dudas el correcto conocimiento de los patrones que rigen nuestra conducta junto a los principios que involucran a la neurobiología pudieran servir de preámbulo para la solución de algunos problemas actuales como: la adicción, la violencia doméstica y el autismo. Por consiguiente, aunque en el argot cotidiano pensemos que microdosis de celos son motivo de salud, amor y crecimiento espiritual; si se exceden de los límites, pueden devenir en enfermedad y en futuros problemas en las relaciones interpersonales.