Se le complica el juego a Kirchner
Cristina Fernández de Kirchner fue la gran vencedora de las pasadas elecciones regionales de medio término en Argentina. Aun cuando su fuerza y los aliados fueron derrotados por las alianzas del gobernante Cambiemos del presidente Mauricio Macri. No obstante, la ex presidenta de Argentina no tiene muchos motivos para celebrar. La persecución judicial en su contra continúa y ha tomado una fuerza digna de vigilar. Tanto la ahora senadora del Congreso argentino, como uno de sus ministros durante su mandato Julio De Vido, se enfrentarán a instancias judiciales por sus respectivas investigaciones pendientes. La ex presidenta argentina debe presentarse en los tribunales a finales de semana.
Fernández de Kirchner se posicionó el pasado domingo como la fuerza política de oposición más firme al gobierno del presidente Mauricio Macri con su frente Unidad Ciudadana. La senadora debe ir a los tribunales porque tiene acusaciones por su presunta implicación en el encubrimiento de ciudadanos iraníes que, según la Justicia, perpetraron el atentado terrorista a la mutual judía AMIA en 1994. El hecho causó la muerte a más de 80 personas.
Desde la semana pasada el juez federal Claudio Bonadío citó a la Fernández. El magistrado también le imputa otras causas como los no probados casos de corrupción durante su gobierno.
Algo bueno de todo esto es que Cristina no podrá ser detenida en el proceso porque salió electa senadora del Congreso en los comicios regionales de medio término del pasado domingo. Así lo establece la Carta Magna de Argentina la cual precisa que goza de inmunidad parlamentaria.
La justicia señala que durante el gobierno Fernández de Kirchner se firmó un Memorándum de Entendimiento con Irán que era para ofrecerle impunidad a los culpables del atentado.
El objetivo de esta nueva investigación, según la propia Cristina Fernández, es perseguirla para truncar su carrera política en ascenso. Sin embargo, los jueces señalan que están investigándola ante un plan que ella y otros funcionarios pusieron en marcha con el propósito de encubrir el atentado. El hecho causó la muerte a 86 personas y heridas a casi 100.
Por su parte, en el caso de Julio De Vido la acusación es por supuestos desvíos millonarios cuando este era legislador por el Frente para la Victoria, con el que Cristina Fernández llegó a la presidencia. De Vido fue titular de Planificación Federal durante los años 2003y 2015. Sobre él pesa otra acusación por parte del mismo juez federal que acusa a Cristina Fernández. Esta es sobre una presunta maniobra defraudatoria
