El libro de los buenos periodistas
De la mano de Germán Amado-Blanco y Yasef Ananda Calderón llega un texto para amantes de la historia del Periodismo cubano y por qué no para los que gustan de leer buenos artículos y crónicas. A lo último me refiero, pues, además de la investigación y notas aclaratorias que se encuentran en el texto, los autores incluyeron como eje medular una serie de escritos que resultan en una compilación de las obras ganadoras del Premio Justo de Lara (1934-1957).
La Editorial José Martí en 2013 acogió este libro para brindarnos la posibilidad de estar más cerca de la pluma de los más prestigiosos periodistas de la época, cuyo trabajo en diversos medios de prensa en el país fue reconocido por la tienda El Encanto con un premio nombrado bajo el seudónimo de José de Armas: Justo de Lara, destacado periodista que dejó una impronta en el periodismo cubano y así como señalan los autores de la investigación que se presenta “tanto los libros de su época juvenil, como los de su etapa más madura (…) son verdaderas rarezas bibliográficas”.
Pablo de la Torriente, Mirta Aguirre, Raúl Roa García, Jorge Mañach, Lisandro Otero… son algunos de los nombres de los galardonados. Llama la atención que en su mayoría los textos de los premiados giran alrededor del tema Cuba Republicana, algunos más que otros. Es obvio, que su labor como periodistas sea reflejar la situación de un país neocolonizado. No se llamaría el libro Periodismo y Nación por cuestiones del azar. Sin embargo, es más la capacidad de los que obtuvieron el Justo… para reflejar los hechos, la utilización de recursos literarios y una excelente utilización de la técnica periodística, los elementos que se aprecian en común y por lo tanto los hicieron merecedor de la distinción.
Cada uno de los textos recompensados por la tienda goza de una actualidad asombrosa, de hecho, impactante. Temas como el salario insuficiente, ¿a dónde va Cuba?, sobre la corrupción en instituciones, el arte cubano, política y educación figuran en las líneas bajo la pluma acusadora de estos periodistas; todo desde el respeto y el análisis profundo con las más variadas usanzas de recursos estilísticos para no caer en discursos aberrases.
Alrededor de los textos compilados aparecen notas dejadas por los compiladores y una investigación que recoge datos importantes para la comprensión de libro en su conjunto, pues, sitúa al lector en el contexto histórico y mediático. Así, también se plasma algunos datos a forma de anexo para conocer a todos los premiados y sus respectivos años de premios, fichas sobre los medios para los cuales ejercían su profesión y fotografías documentales como evidencia visual de lo más relevante de los premios, discursos pronunciados y homenajes.
Este material bibliográfico llegó manos de estudiantes de Periodismo donde el quehacer de la información en la prensa se renueva con los recientes cambios en cuanto a política y sociedad. Arma importante, se pudiese decir, resulta este libro para recordar las distintas formas de escribir y buscar a razón de cada interpretación en la lectura de un estilo que en el diarismo se pierde. Un breve recordatorio de cómo en tiempos más convulsos y con menos acceso a la tecnología de la información y la comunicación existía un Periodismo que trasciende y traspasa las fronteras de la época.
