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viernes, 8 de diciembre de 2017

La Leishmaniasis, un "parásito" amenaza

Por RaizaM.

Una nueva investigación por parte de laboratorios franceses ha descubierto que el genoma del parásito que causa la Leishmaniasis mutará ante los cambios ambientales en un corto periodo de tiempo, lo cual explicaría su abundancia en el continente europeo. Se estima que, hasta la fecha, alrededor de 12 millones de personas en más de 98 países hayan sido infectadas por este parásito que provoca una enfermedad humana y también veterinaria.

La publicación de la revista Nature Ecology & Evolution, destaca que la adaptación de la Leishmania se debe a una frecuente amplificación de cromosomas, es decir, a la incorporación de un número mayor de cromosomas del que debería.

Los criterios fueron aportados por científicos de Barcelona y París, en colaboración con investigadores del Instituto de Medicina Tropical de Antwerp y de la Universidad de Montpellier.

La agresividad de esta bacteria ha llegado a compararse con la del temido cáncer, debido a que las variaciones en el número de cromosomas, denominadas como aneuploidías, hacen que se encuentren similitud en las dos enfermedades.

Sin dudas, el descubrimiento temprano representa un avance hacía una mejor comprensión de la infección de Leishmania en humanos y, en concreto, en la resistencia de los parásitos a su tratamiento, su patogenicidad, y su movilidad en diferentes tejidos.

Según reportes médicos, la leishmaniasis está considerada como una de las cinco enfermedades infecciosas más importantes. Cerca de 350 millones de personas con riesgo de infección. Entre las manifestaciones clínicas que presenta la enfermedad se encuentran tres maneras principales: cutánea, visceral y mucocutánea. Lo diferente de este parásito es que como presenta diversidad en especies hace que un gran número de estas se adapten a otro gran número de huéspedes. Su principal hábitat para el desarrollo es dentro de la mosca arenera que transmite Leishmania a varios vertebrados, como, por ejemplo, a roedores, perros, y a humanos.

Una vez en el huésped, Leishmania crece en el interior de las células del sistema inmunitario, principalmente en los macrófagos, causando diversas patologías que pueden llevar a la muerte del huésped.

Para identificar los mecanismos genéticos que permiten la adaptación genómica de Leishmania, los científicos han desarrollado nuevas técnicas para la genómica basada en las últimas técnicas de secuenciación.

Sin embargo, aún es muy pronto para hablar de una vacuna para humanos. Hasta la fecha, sólo existen algunos tratamientos, todos con restricciones en relación a su administración, toxicidad o coste.