Sudar demasiado ya no es un problema
Las personas que sudan constantemente pueden optar ahora por un tratamiento quirúrgico denominado simpatectomía. Esta cirugía es realizada por cirujanos torácicos y consiste en la destrucción de los nervios del sistema nervioso simpático cerca de la columna. Ello no significa que todas las personas que padecen de hiperhidrosis (nombre científico de la enfermedad) necesariamente tienen que llegar al quirófano. Para los casos más leves al paciente se le puede recetar sales de aluminio que pueden tener diferentes presentaciones tanto en polvo, toallitas o espráis.
Para los casos en que la sudoración es excesiva también se pueden realizar inyecciones de botox en las zonas afectadas, o sea, en las regiones por las cuales se desprende mayor sudoración.
Si la inyección se produce en las palmas de las manos es necesario realizar la intervención con anestesia. Debido a que es una sustancia similar a la silicona, en las axilas la inyección de botox no requiere anestesia. Sin embargo, su duración máxima es de solo seis meses.
La hiperhidrosis es un aumento importante de la sudoración que se suele dar con más frecuencia en las axilas y en las palmas de las manos. Para nada quedan fuera los pies, donde también se produce aunque con menos frecuencia y con menor repercusión social.
Su mecanismo de acción activa una sobreactivación del sistema nervioso simpático, el cual se encarga de preparar al cuerpo para la acción y la producción de la energía que necesita.
Sus acciones radican en liberar dos hormonas, adrenalina y noradrenalina, que desencadenan la respuesta completa: se experimentan todos los síntomas que componen la respuesta de ansiedad (lucha y huida).
También presenta un componente psicológico importante. Algunas personas tienen temor a enfrentarse a una reunión importante o una entrevista de trabajo. En esos casos, la sudoración puede ser excesiva llegando a ser una causa social.
Las personas pueden ser marginadas en ocasiones ante tales problemas. El hecho concreto es que ante la presión, es inminete un problema incluso social, pues nuestra ansiedad se dispara y esta, a su vez, aumenta la sudoración. Un círculo vicioso que puede complicar nuestras relaciones sociales y afectar a nuestra calidad de vida.
En la mayoría de los casos se desconoce la causa de iniciación del padecimiento; a ello se le denomina hiperhidrosis primaria y es la más frecuente. Solo el 10% de los pacientes presentan una causa conocida entre las que se encuentran algunos tumores cerebrales.
