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sábado, 6 de enero de 2018

Alemania, discrepancias internas y dureza en el exterior

Por Diana M.

Alemania cierra filas y define posiciones. La Unión Socialcristiana de Baviera (CSU), formación afín a los conservadores de Angela Merkel, recorta su enfoque humanista, y propondrá limitar las ayudas a los refugiados, así como reforzar la vigilancia sobre los asilados menores de edad, en la campaña electoral para los comicios regionales.

Según expresó a medios de comunicación nacionales el líder de la CSU en el Bundestag (Parlamento federal) y también ministro de Transportes, Alexander Dobrindt, Alemania no puede seguir siendo un punto de atracción para refugiados de todo el mundo". Su propuesta es que en el futuro las peticiones de asilo se beneficien con prestaciones mínimas durante 36 meses, antes de poder acceder al equivalente de lo que perciben los receptores de ayuda social del país. En el caso de aquellos a los que se les rechace su petición de asilo, recibirán de igual modo ayudas muy limitadas mientras se tramita su expulsión.

¿Por qué la mirada sobre los menores de edad? A su juicio, Alemania no debe acoger a "cachorros del yihadismo" o jóvenes dispuestos a perpetrar atentados. Según los postulados de la CSU no van a continuar criando cuervos para que les saquen los ojos.

¿En qué invertir entonces? El CSU propone aumentar los gastos de defensa de la nación a un nivel que amplía la brecha política con los socialdemócratas (SPD), previo a las conversaciones para formar una coalición de gobierno.

De hecho, algunos medios internacionales especulan que los gastos de defensa alcanzarán el objetivo de la OTAN del 2 por ciento de la producción nacional; lo que incluye más dinero gastado por concepto de ejército, drones e infraestructura transportista.

Ante el actual panorama, el SPD no solo rechaza el objetivo de gasto de defensa de la OTAN, además acusó a Merkel y sus conservadores de doblegarse ante las demandas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

Un giro a la derecha del partido bávaro complicaría la ya compleja formación del nuevo Gobierno de Merkel, ante la apertura de las conversaciones que tendrán lugar el próximo domingo entre el bloque conservador de la canciller, y los socialdemócratas de Martin Schulz.