Artur Mas se despide del PDeCat
El que fuese presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, anunció este martes su retirada de la vida política. Con la sentencia del Caso Palau a la vuelta de la esquina, Mas ha decidido echarse a un lado para centrarse en su defensa judicial. El pupilo de Jordi Pujol y antecesor de Carles Puigdemont, abandona la formación a una semana para que se conforme la mesa del Parlament catalán. Sobre el asunto y la situación de Puigdemont, Mas no quiso mojarse aunque sí quiso dejar claro que “primero es el país, luego el partido y finalmente la persona”.
Si hay un nombre propio que ha marcado el llamado “procés” catalán ese ha sido el de Artur Mas. El que fuese presidente de la Generalitat de Cataluña hizo crecer y creer al independentismo que era posible una ruptura con el Estado español. Unas consignas que ha sabido llevar a extremos su sucesor, Carles Puigdemont, ahora exiliado en Bruselas. Pero a todo el mundo le llega su fin y parece que a Mas ya le ha tocado. Su fin político, claro. Así lo anunció el mismo expresident este martes ante parte de la cúpula del PDeCAT. Mas deja su presidencia y se retira así de la vida política para “dar paso a nuevos liderazgos”. En una rueda de prensa que tuvo lugar en la sede barcelonesa del partido, Mas, quien ya había puesto al tanto de sus intenciones de abandonar la política tanto a los militantes como a la coordinadora de la formación, Marta Pascal; aseguró que su “paso al lado” no hay que interpretarlo “como un alejamiento” al proyecto de Junts per Catalunya y el PDeCat.
“Primero es el país, luego el partido y finalmente la persona”, aseguró Mas quien se retira a menos de una semana para conocer la sentencia del Caso Palau para el que necesita tiempo para “encarar con mejores garantías los procesos judiciales”. Está implicado en el caso como pupilo de Jordi Pujol aunque no ha tenido que sentarse en el banquillo ni en calidad de testigo ni de investigado por esa supuesta recepción de hasta 5,5 millones de euros por parte de Ferrovial a cambio de cesión de obra pública, a través del Palau de la Música.
Unos hechos con los que prefiere no salpicar al partido y por ello ha decidido alejarse. Pero para ello ha elegido una fecha clave. Y es que en una semana se formará la mesa del Parlament después de las elecciones del 21 de diciembre en las que el independentismo consiguió la mayoría en las urnas. Sobre Carles Puigdemont y la posibilidad de ser investido como nuevo presidente a pesar de estar fugado en Bruselas, Mas no quiso dar una su opinión y agregó que
en dos años no he hecho una sola declaración que cuestione lo que él ha hecho”. Así mismo, ante la insistencia de los periodistas por querer saber su opinión ante tal asunto, Mas declaró que es al president al que hay que preguntar. “Yo no seré quien dé consejos a Puigdemont, y menos en público”, recalcó antes de sentenciar que “primero es el país, luego el partido y finalmente la persona”.
