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sábado, 13 de enero de 2018

Perú aumenta el cultivo de coca

Por EvelynR

La coca es mundialmente famosa por sus alcaloides, entre los cuales se obtiene, por un proceso químico, el clorhidrato de cocaína, un potente estimulante del sistema nervioso central con alta tendencia a originar hábitos de dependencia psicológica. La planta de la que se obtiene la coca es originaria de las escarpadas estribaciones de los Andes amazónicos, siendo ampliamente cultivada en países de América Latina como Bolivia, Argentina y Perú. En el caso de esa última nación, de acuerdo con datos de las Naciones Unidas los cultivos crecieron en este país andino, elevándose el área cultivada con hoja de coca a 43 900 hectáreas en 2016.

 

Luego de 4 años de bajas consecutivas, el área cultivada de la hoja de coca en la región latinoamericana volvió a crecer, creciendo en el caso de Perú, en un 9 por ciento en Perú, de acuerdo con un informe de la oficina contra las drogas de Naciones Unidas.

Kristian Hoelge, representante para las Naciones Unidas de la oficina contra las drogas y el crimen (UNODC), explicó que estas estadísticas muestran un aumento de 2 600 hectáreas con respecto al 2015. Añade que los cultivos subieron de 40 300 a 43 900 hectáreas, informó el oficial, si bien el área sembrada en Perú constituye una producción potencial de más de 100 mil toneladas de coca.

Hoelge explicó que el aumento es una respuesta a la gran demanda del mercado en la región, en base al aumento del consumo de productos derivados de la coca como el crack, además de que también hay una mayor demanda de Asia y África.

Este incremento de los cultivos de coca se produce en un contexto donde las incautaciones de cocaína tuvieron niveles históricos el pasado año. Y es que, de acuerdo con el reporte de la ONU, el incremento es considerable en toda la región, por ejemplo, en Colombia los cultivos subieron un 52 por ciento y en Bolivia un 14 por ciento. Relacionado con esto, el funcionario indicó que en lo relativo al decomiso de cocaína, este estuvo en el orden de 875 toneladas en el presente año.

Por su parte, la jefa de la entidad antidrogas de Perú, Carmen Masías, expresó que el presidente de ese país delineará un plan para reducir la siembra de la coca, el cual implica cultivos alternativos y programas de reducción de la pobreza.

Otro problema relacionado con la coca en esa nación andina es que la mayor parte de la coca se cultiva en un área selvática, sin ley, en la que operan reductos de la guerrilla Sendero Luminoso y en zonas próximas a la región turística de Cuzco.

A partir de estos datos, según la ONU, actualmente Perú y Colombia son los mayores productores mundiales de hoja de coca y cocaína.

Y es que en Argentina, Bolivia y el Perú, las maneras tradicionales de uso y consumo de la hoja de coca son legales y apreciadas por la mayoría de la población, principalmente de zonas rurales para fines rituales como forma de agradecimiento a la madre naturaleza. La planta de coca siempre ha tenido un importante papel en las culturas andinas como energético para el trabajo; para el trueque entre productos; para fines rituales en la relación entre los hombres y la naturaleza; como agente psicoactivo para inducir trances ceremoniales; como digestivo y con fines analgésicos y curativos en intervenciones médicas.

El acullico, chacchado o mascada es una práctica social, ritual y medicinal, en la que se coloca un pequeño bolo de hojas de coca en la boca entre la mejilla y la mandíbula. Esta práctica se realiza en ciertas zonas de América del Sur como el norte de Argentina y de Chile, y el occidente de Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia. Fundamentalmente se usa para evitar o disminuir los efectos del apunamiento (mal de altura) causado por la falta de oxígeno en la atmósfera a grandes altitudes, así como para disminuir los efectos de la fatiga, el hambre y la indigestión.