¿Qué dieta es la mejor para este 2018?
La locura por las dietas lleva a constantes apariciones de nuevos tipos, tantos que es fácil perderse entre tantas combinaciones, muchas de las cuales no son efectivas y carecen de basamentos médicos. Los principales elementos que, de acuerdo con los especialistas, se deben tener en cuenta para una dieta deben basarse en un plan de alimentación equilibrado que encaje con su estilo de vida. Eso quedó reflejado en la clasificación de las mejores dietas de 2018 de la revista U.S. News & World Report's. Las dos dietas que quedaron en primer lugar fueron la dieta mediterránea y la DASH (Enfoque dietético para detener la hipertensión), y ambas responden a esa descripción pues ofrecen comida real y directrices razonables y flexibles.
Por ejemplo, en lo relativo a la dieta mediterránea, la editora administrativa asistente de salud de la revista estadounidense, Angela Haupt, aseguró que es sabrosa, sensible, nutricionalmente buena, y existen magníficas investigaciones que respaldan que es útil evitar o controlar una serie de enfermedades crónicas.
La dieta DASH es el régimen recomendado para las personas que padecen de hipertensión arterial o prehipertensión. Esta dieta tiende a disminuir la tensión arterial sin necesidad de medicamentos y consiste en el consumo controlado de alimentos como ciertas frutas, verduras y lácteos de bajo contenido graso.
Por otro lado, los especialistas señalan que debe evitar dietas de moda que soliciten que adopte restricciones severas, como por ejemplo, la nueva dieta de moda, la Keto, que fue muy criticada, quedando en el último lugar de la lista. Y es que esta requiere que las personas restrinjan severamente la ingesta de carbohidratos, al mismo tiempo que permite alimentos ricos en grasa, algo que simplemente no es sostenible.
n ese sentido, en opinión de Haupt, aunque es la dieta del momento puede ser un plan bastante extremo, pues hay un severo límite de carbohidratos y, de acuerdo con los expertos, no es necesario ser tan extremo ni tan restrictivo. Añadió que si una dieta recomienda tocineta, no puede tomarse en serio como una forma de alimentación que promueva la salud.
La clasificación de la revista está dada por un panel de expertos de los principales nutricionistas, asesores de dieta y médicos de Estados Unidos, quienes evaluaron 40 dietas en nueve categorías, tales como la facilidad de cumplimiento, las probabilidades de pérdida de peso a corto y largo plazo, y la efectividad contra afecciones crónicas.
Tanto la dieta DASH como la mediterránea quedaron en primer puesto pues permiten a las personas flexibilidad de elección entre una amplia variedad de alimentos saludables, posibilitando que coman lo que más les convenga.
De acuerdo con Kelly Hogan, nutricionista clínica y administradora de bienestar en el Centro del Seno Dubin del Hospital de Mount Sinai, de Nueva York, esos regímenes alimentarios comparten varios temas similares: muchas frutas y verduras de colores, grasas saludables, proteínas magras, granos integrales, lácteos bajos en grasa, y evitar de los alimentos procesados, enlatados o ricos en grasas saturadas. Además, no restringen nada ni excluyen ningún alimento o grupo de alimentos. También tienen a su favor el respaldo de datos científicos que muestran que ayudan a las personas a perder peso y a evitar enfermedades crónicas.
En ese sentido, Haupt explicó que existe una falta de investigación sólida sobre la nutrición y las dietas, por lo que cuando una como la dieta mediterránea tiene el respaldo de investigación buena y sólida, eso dice algo.
Las dietas como la Keto son tan restrictivas que es lógico que uno pierda peso rápido porque no está comiendo las suficientes calorías para sostener las actividades básicas del cuerpo ni ningún ejercicio y, por lo tanto, no son dietas que ninguna persona pueda sostener a largo plazo.
El consejo de los especialistas para aquellos que hacen dieta y desean tener éxito a largo plazo, es hacer una observación detallada de ellas mismas y de lo que es importante para ellas. Añadieron que, en general, las personas deben enfocarse más en los aspectos positivos de la comida, en lugar de los negativos.
