Un final romántico, pero muy dramático
Después de Romeo y Julieta, la historia de amor por excelencia del dramaturgo, poeta y actor inglés William Shakespeare, pocas veces nos hemos tropezado con situaciones que tengan a este universal sentimiento como protagonista, ya sea para bien o mal. Pero esta vez sí que el amor se vio manifestado en los últimos instantes de una joven, de la tierra de Shakespeare, quien tras vivir un tiempo feliz falleció de una insólita manera. Los hechos sucedieron así. Murron McDermid, una chica británica de 19 años, volvía a casa con su familia, el pasado 11 de agosto, tras disfrutar de unas lindas vacaciones.
Esa noche, a su regreso, se unió a su novio y amigos y fueron, directamente, a un pub de su ciudad para celebrar su regreso. Esto fue después de que pasara por su apartamento a dejar la maleta del viaje y antes de que los empleados del bar les prohibieran la entrada al establecimiento porque McDermid se hallaba en un claro estado de embriaguez.
También sus amigos intentaron convencerla de que parara y fuese a casa, pero la muchacha se dirigió a un destino desconocido, desde donde dedicó los últimos instantes de su vida a decirle a su novio lo mucho que le quería. Eso sin saber, claro, que la muerte le esperaba en plena conversación telefónica. Y es que esta cayó del último piso de un edificio de aparcamientos de nueve plantas en Gloucester (Reino Unido), según informó el diario británico The Sun.
Un médico forense declaró que el accidente fue provocado por intoxicación etílica, es decir, un aumento del contenido de etanol (alcohol) en sangre por encima de los niveles tolerados por el organismo, causando la muerte. «Ella tenía elevados niveles de alcohol en el torrente sanguíneo y esto la dañó severamente», añadió el especialista, quien aclaró que Murron no se suicidó, como muchos creían.
Un trágico desenlace que concluyó cuando su novio la llamó por teléfono para tratar de encontrarla y lo último que oyó de sus labios es que lo quería mucho. Lo siguiente fue un grito. Y el final. A los pocos minutos, el joven halló su cuerpo inerte de su novia en el suelo, un hecho que no pudo cambiar porque, y aunque llamó a la ambulancia, ya era demasiado tarde.
Por eso es importante que controlemos el consumo de alcohol y otras sustancias que pueden resultar dañinas e incluso mortales. Tenga presente que cada año se producen 3,3 millones de muertes en el mundo debido al consumo nocivo de alcohol, lo que representa un 5,9 % de todas las defunciones y un factor causal en más de 200 enfermedades y trastornos.
