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domingo, 11 de febrero de 2018

¿Renuevan los votos Argentina e Israel?

Por Feco

El acompañamiento de la abstención argentina en el voto de la ONU contra la decisión de Trump sobre Jerusalén -aun siendo menos favorable que votar en contra de la resolución- también fue una declaración que significó que el país no se alinearía automáticamente con una agenda abierta anti-Israel. Sin embargo, queda claro que el país sudamericano ha dado un vuelco en sus relaciones con otras naciones del mundo.

La relación entre Israel y Argentina ha mejorado notablemente desde que el presidente Mauricio Macri asumiera el cargo en diciembre de 2015. Su ascenso marcó el comienzo de grandes cambios tras 12 años consecutivos en los que el país estuvo gobernado por los esposos Néstor y Cristina Kirchner. Durante ese período, el país no solo se alineó con los estados populistas de izquierda en la región, sino también con el principal enemigo de Israel: la República Islámica de Irán. Cristina Kirchner, presidenta desde finales de 2007 hasta 2015, ahora enfrenta un arresto por su presunto papel en encubrir la responsabilidad iraní en el atentado de 1994 contra un centro cultural judío en el que murieron 85 personas. La vicepresidenta de Argentina, Gabriela Michetti, realizó una visita oficial a Israel en enero. En una entrevista exclusiva con el programa en español News24 de i24NEWS, la número dos de Macri explicó cómo la nueva administración en Buenos Aires ha refrescado la política exterior del país, particularmente su postura hacia Israel. "El hecho de que Argentina decidió abrirse y reanudar relaciones con los diferentes países del mundo, identificando aquellos países que podrían convertirse en socios estratégicos para el crecimiento, es algo muy significativo ", argumentó Michetti." En el pasado, el país estaba cerrado y mantenía relaciones con naciones que no puedan describirse como amigables con el resto del mundo, como en el caso de Venezuela, o Irán, Cuba ", afirmó.

La política exterior de Argentina fue puesta nuevamente a prueba por la decisión del presidente estadounidense Donald Trump, el pasado 6 de diciembre, de reconocer a Jerusalén como la capital del estado judío y la subsecuente votación en la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) rechazando la iniciativa estadounidense por 128-9. Argentina se abstuvo y el número dos en la cadena de mando detalló las razones detrás de esa postura. "Lo que hemos decidido es continuar en la línea de la política exterior histórica argentina que es: en las Naciones Unidas, todo por el consenso", dijo Michetti. La vice explicó que espera que esta situación pueda resolverse entre “todos nosotros en lugar de hacer soluciones unilaterales que luego probablemente generen más problemas”. Según Michetti, Argentina no pretende generar más controversia en sus alianzas con el exterior: "Todo lo contrario. Tratamos de encontrar soluciones que se comparten ". "Argentina ha tomado una decisión coherente y consistente con sus posiciones en general y no solo con Israel en las Naciones Unidas", argumentó Michetti. Esto significa que cuando se deben definir situaciones que son controvertidas, que tienen polémica, lo que tienes que hacer es buscar el consenso e intentar que las decisiones sean tomadas por todos, convencidos de que estamos en un camino más cercano a la paz que a la violencia, en beneficio mutuo ", concluyó. Habría que preguntarle a Donald Trump qué tan contento está con estas declaraciones.