Cáncer colorrectal, un enemigo español
En el 2015 un gran por ciento de las muertes en España tuvieron como causa el cáncer. Según los datos de la Red Española de Registros de Cáncer (REDECAN) el tipo más frecuentemente diagnosticado fue el de colon y recto, con un total de 41 441 casos. Fue además el segundo más frecuente en ambos géneros, en el caso de los varones 24 764 lo padecieron, y cerca de 16 677 mujeres.
Otras instituciones de la salud corroboran la información. El Instituto Nacional de Epidemiología calculo que ya desde un año antes, en el 2014, la mortalidad por estos tipos de cáncer en la nación ibérica fue de 11 778 muertes, con mayor incidencia en los hombres, con más de seis mil novecientos casos (6951) y cerca de cuatro mil novecientos casos entre las féminas.
Como consecuencia, las autoridades sanitarias en el país han trazado algunas políticas que ayuden a contener el impacto de este grave problema sanitario. Sin dudas, en su diagnóstico temprano y posterior tratamiento se están invirtiendo la mayor parte de los recursos humanos y materiales.
La colonoscopia es la herramienta más frecuente usada para buscar pólipos –agentes precursores de dicho cáncer-, o cánceres en fases iniciales, aun sin síntomas en los pacientes. Así mismo, es usado con mayor intención cuando el paciente tiene antecedentes familiares.
Con una correcta prevención y tratamiento temprano a la enfermedad, en España se han alcanzado resultados alentadores en los últimos 2 años. Ello ha podido corroborarse a través de la supervivencia de los pacientes, superior al 60 por ciento a los 5 años. No obstante, los galenos insisten en que lo más efectivo es la prevención primaria: brindar información, educar y estimular una serie de hábitos y factores que se ha demostrado estar asociados con una disminución del riesgo de cáncer de colon y recto.
Entre los hábitos profilácticos se hayan los factores dietéticos, la actividad física regular y el uso corriente de aspirina y de anticonceptivos orales en mujeres premenopáusicas.
Una dieta correcta es fundamental
Estudios recientes han demostrado que el consumo de frutas y verduras trae beneficios en el combate de estos tumores. Los patrones dietéticos vegetarianos se han vinculado a una reducción significativa de los riesgos, el consumo de fibra dietética, en particular la procedente de los cereales integrales, tales como el salvado de trigo sin procesar, está asociado inversamente con el riesgo de cáncer colorrectal, y al parecer protege al recto de la incidencia de cáncer.
Los criterios sobre el uso de ácido fólico son difusos y controversiales. Algunos médicos sostienen que en el caso de los adultos podría ser perjudicial, para la formación de adenomas o pólipos, precursores del cáncer de colon y recto. Es por ello que no se considera un suplemento no recomendable.
En cambio, un mayor consumo de calcio dietético o suplementario, procedente de la leche y el yogur, ayuda a prevenir la aparición de pólipos de colon y, en menor medida, reducen el riesgo del cáncer de colon, aunque no el de recto.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) aseguro que el cáncer de colon se asocia a un estado deficitario de vitamina D. Por ello recomiendan suplementar la dieta con vitamina D, y una mayor exposición a la luz solar.
