Hollywood no permitirá más castings en habitaciones de hoteles
Luego de la serie de denuncias por agresiones sexuales entre los famosos del cine, el Sindicato de Actores de Hollywood (SAG-AFTRA), el mayor de su tipo en el mundo, exigió que se terminen las pruebas de "casting" en habitaciones de hoteles o en residencias privadas, dos entornos identificados por numerosas actrices como los escenarios de violaciones y abusos de Harvey Weinstein.
Gabrielle Carteris, presidenta del sindicato, dijo que el gremio esta comprometido “a abordar el escenario que ha permitido a los depredadores explotar artistas tras puertas cerradas y bajo la apariencia de una reunión profesional”.
Para consolidar la exigencia, publicaron las primeras directrices de un Código de conducta sobre acoso sexual. Entre sus términos, el documento reza claramente: "SAG-AFTRA se opone a que audiciones, entrevistas o reuniones profesionales similares se realicen en cuatros privados de hotel o residencias privadas".
El llamado va dirigido fundamentalmente a productores y otros con influencia o control en la carrera profesional de actrices y actores. De igual modo, el sindicato advirtió a los agentes o representantes a que tampoco formen parte del pervertido juego del acoso, concertando este tipo de audiciones.
¿Por qué residencias, habitaciones o cuartos de hotel y no otros espacios son señalados en el nuevo código? Todo parte del proceder del propio Harvey Weinstein. El reconocido productor de Hollywood invitaba a las actrices a su cuarto de hotel para “hablar de trabajo”, y a los minutos se desnudaba, le ofrecía o pedía a la actriz un masaje, o les pedía que lo vieran masturbarse. Promesas de fama, o amenazas de arruinar sus carreras, eran las consecuencias del sí o el no.
Angelina Jolie, Mira Sorvino, Rosana Arquette, Cara Delevingne y Gwyneth Paltrow, son algunos de los nombres que se encuentran en la lista de víctimas y que posteriormente denunciaron al exmagnate, aún bajo proceso de investigación policial.
El caso Weinstein fue apenas el inicio de una gran cadena de abusadores, personalidades de la industria del entretenimiento, que actuaron también en cuartos de hotel.
La SAG-AFTRA representa a unos 160 mil actores y otros profesionales del entretenimiento y los medios de comunicación. Para algunos resulta un poco tardía su proyección, hace ya varios meses que las fechorías de Weintein salieron a la luz y con ellas la gigantesca campaña del Me Too, y la dirección del gremio no se había proyectado, al menos profilácticamente. Pero nunca es tarde si la dicha es buena.
