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jueves, 19 de abril de 2018

La trashumancia como Patrimonio Cultural de la Humanidad

Por thais

Cientos de ciudades y monumentos históricos en el mundo se han convertido en Patrimonio Cultural de la Humanidad, debido a su antigüedad, su riqueza cultural o la importancia adquirida como consecuencia de hechos históricos trascendentes ocurridos allí. Sin embargo existen tradiciones y costumbres de las distintas comunidades en el mundo que igualmente se convierten en Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

Tal es el caso de la trashumancia, que se trata de un tipo de pastoreo en constante movimiento, adaptándose a espacios productivos diferentes. Su diferencia con las comunidades nómadas, es que las personas que la practican viven en asentamientos fijos, usualmente en los pueblos. Es una actividad en la que se traslada periódicamente al ganado con el objetivo de aprovechar las mejores condiciones posibles de los suelos, para el óptimo rendimiento de los animales. Se basa en el aprovechamiento de todas las zonas de pastoreo en dependencia de las épocas del año.

La propuesta internacional para convertir esta práctica en patrimonio es presentada por Italia, junto a Grecia y Austria, el pasado 27 de marzo frente a la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura en la sede central en París.

La nominación para obtener tal categoría es definida por la Asociación de Agricultores Directos Coldiretti como un gigantesco paso, que debe ir acompañado de la protección de los pastores italianos , quienes se encuentran esparcidos en unas 60 000 granjas del país, especialmente en las áreas más marginadas socialmente. De acuerdo a los datos de la organización, el rebaño nacional de ganado ovino, relacionado a estos puntos de cría, agrupa a más de siete millones de ovejas, principalmente en Cerdeña.

Es una tradición en la que se enlazan cuestiones culturales, productivas y paisajísticas de las diferentes comunidades que la practican, las cuales se extienden hasta el Gargano, Italia. Sin embargo la trashumancia existe también en los Alpes, principalmente en Lombardía y Val Senales, en Trentino-Alto Adige, donde el traslado de los animales es vertical, en la búsqueda de mayores o menores elevaciones.

En Italia ya forman parte del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad una serie de práctica que reflejan profundamente la identidad del país, entre ellas el arte de los pizzeros, el cultivo de la viña el vaso de la comunidad de Pantellería y la cetrería, es el arte de cazar con aves rapaces. En caso de aprobarse la calificación para la trashumancia, esta pasaría a engrosar el listado italiano de patrimonios, teniendo en cuenta igualmente la rica cultura e historia de cualquier país del llamado ‘’Viejo Continente’’.