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miércoles, 30 de mayo de 2018

Me olvido de todo, pero soy más inteligente

Por Aisha

¿Se te olvidan cosas elementales? ¿Te dicen a cada minuto que eres distraída, que pones poca atención a lo que haces o que eres, sencillamente, un “desastre”? Bueno, pues a todos esos que te tildan tan mal, explícales que tu olvido podría ser una función decisiva para la inteligencia humana. Investigaciones realizadas en la Universidad de Toronto, Canadá, publicadas en la revista “Neuron” -especializada en el área de la ciencia- ahonda en el tema. Los investigadores Paul Frankland y Blake Richards estudiaron a ratones y las pesquisas arrojaron que la formación de nuevas neuronas en el hipocampo -el área del cerebro que se encarga de la memoria- favorece que algunos recuerdos se vayan perdiendo poco a poco.

 

Es decir, nuestro cerebro se va deshaciendo de información inútil para poder almacenar nuevas y, quizá, más importantes.

Esta condición nos hace más inteligentes porque, afirman los expertos, nuestros cerebros olvidan los detalles específicos sobre ciertos eventos del pasado, pero sí retienen el mismo evento de una manera más general.

Y se piensa que esto nos permite poder resumir mejor nuestras experiencias pasadas y deshacernos de la información irrelevante, y conservar la más importante.

Nuestro cerebro, añaden, tiene una mayor capacidad para diferenciar lo relevante de lo que no lo es.

A pesar de que hay personas que le quitan el mérito a esta investigación es indudable que ofrece evidencia importante.

En resumen, el hecho de olvidar cosas de vez en cuando es sinónimo de que nuestro cerebro está haciendo lo que siempre debió hacer.

Nuestras mentes son como computadoras y si están llenas de información van a funcionar lentamente. Por eso, olvidar las trivialidades es saludable y nos permite adaptarnos a las nuevas situaciones sin dificultad, con certeza