Padres y madres por igual
El Congreso de los Diputados de España impulsó esta semana una proposición de ley para que los permisos de paternidad y maternidad sean igualitarios en un período de hasta 16 semanas, intransferibles y remunerados en su totalidad. La iniciativa presentada precisamente por Unidos Podemos entra en estos momentos en una fase obligatoria de tramitación parlamentaria pero con grandes perspectivas de ser aprobada dentro de unos pocos meses, dado que ha propiciado un favorable ambiente de consenso bastante poco habitual en estos tiempos ya que todas las fuerzas políticas destacaron su necesidad y se pronunciaron unánimemente a favor.
Entre los objetivos de esta proposición de ley, demandada ampliamente por numerosos colectivos feministas y la huelga de mujeres celebrada el pasado 8 de marzo, está el reparto de las tareas de cuidados entre los hombres y las mujeres, estableciéndose una responsabilidad de manera igualitaria de la crianza de los hijos, y también detener la lacra de la discriminación que sufren las mujeres en el mundo laboral por el recelo a sus bajas por causa de la maternidad.
El PP también apoyó la toma en consideración de la proposición de esta ley a pesar de que el Gobierno de Mariano Rajoy había vetado la iniciativa dos veces bajo el pretexto de que iba a incrementar en unos 3.500 millones de euros el gasto de dinero público. Ahora, destacó en cambio que la igualación de los permisos de paternidad y maternidad es una herramienta imprescindible cuando se habla sobre la igualdad de hombres y mujeres.
El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, que fue el encargado de defender la iniciativa en el Pleno del Congreso, lamentó el retraso de dos años en la tramitación de este necesario proyecto, pero también celebró que la iniciativa haya hecho que se note que el Congreso español ha echado al PP del Gobierno y que transmita a los ciudadanos de la nación que a partir de ahora el Congreso de los Diputados cuenta y manda.
A falta de posibles modificaciones que sufra durante el período que dure su tramitación parlamentaria, la proposición de ley plantea que estos permisos san un derecho individual tanto de la madre como del padre. Por consiguiente, cada progenitor tendrá derecho irrefutable al mismo periodo de suspensión sin que ninguna parte de este pueda ser cedido o compartido con la pareja, y con derecho a una prestación del 100%.
El total del permiso para cada miembro de la pareja sería de 16 semanas y se fija en dos periodos distintos en el caso de los hombres. El primero, llamado "permiso parental inicial", sería de una duración de dos semanas y es obligatorio acogerse a él desde el momento del nacimiento o adopción del niño.
Después llegaría el llamado "permiso parental para la crianza" que tendrá una extensión de 14 semanas. Los padres se verán obligados a coger cuatro semanas a tiempo completo y otras 10 más a disfrute voluntario. Por su parte, las madres tienen garantizadas las 16 semanas.
