La Eurocámara dice no al plan de divorcio con Reino Unido
La institución comunitaria no ve con buenos ojos la propuesta de separación presentada por el Reino Unido. La Eurocámara no aprueba el plan de Londres al considerar que no salvaguarda los derechos de los ciudadanos europeos que se encuentran en suelo británico. Desde el grupo de negociación del Brexit, presidido por Guy Verhofstadt, se asegura que dicho plan “relega a esos ciudadanos a un estatus de segunda clase”. Así mismo, se vuelve a reclamar a Londres tanto la concreción de una fecha de corte como el derecho de los ciudadanos afectados por el divorcio para reclamar ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea.
El divorcio entre la Unión Europea y el Reino Unido se cobró este lunes un capítulo más. En esta ocasión ha sido protagonista la institución comunitaria quien ha hecho público su rechazo ante la propuesta del plan de Londres sobre cómo llevar a cabo los términos del Brexit. Desde la Eurocámara no ha gustado el planteamiento del Gobierno de Theresa May respecto a la situación en que los ciudadanos comunitarios en suelo británico quedarían. Así lo ha dejado claro el Parlamento Europeo que desde primera hora de este lunes vetó el acuerdo. Hasta 3,2 millones de europeos residen en Reino Unidos y 1,2 millones de británicos lo hacen en un país de la Unión Europea. Unos números que llevan a la Unión a luchar y mantener los derechos de los ciudadanos a pesar del Brexit, rechazando así la propuesta londinense. El equipo negociador del divorcio en el bando comunitario, presidido por Guy Verhofstadt, ha manifestado que dicho plan “relega a esos ciudadanos a un estatus de segunda clase”.
La Eurocámara tacha de difusa la nueva categoría creada por el Gobierno de May donde se habla de ciudadanos con estatus de asentado. Un derecho que tendrán que solicitar y demostrar tras cinco años viviendo en suelo británico y esperar pacientemente hasta alcanzar los años en caso de que la salida se produzca cuando la persona lleva menos de dichos años residiendo en Reino Unido. La Eurocámara denuncia que así se reducen los derechos de estos ciudadanos que correrán “un mayor riesgo de expulsión que ahora”.
Así mismo, la institución comunitaria reclama, de nuevo, a Londres que concrete una fecha para su desconexión definitiva. El Parlamento propone el 30 de marzo de 2019 como fecha ya prevista. Además, se exige el derecho de los ciudadanos afectados por el divorcio para reclamar ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea.
