París muestra su Alta costura
La capital francesa despliega casi todo el año especiales eventos y pasarelas de moda que ocupan importantes lugares y se llevan a cabo por todo lo alto.Las celebraciones y presentaciones de la llamada Alta costura son habituales. Con el inicio de la temporada estival inicia la semana de la Alta Costura en París 2017, acontecimiento ya habitual en las tardes parisinas de comienzos del verano, que acoge a firmas miembros de la Federación de la Alta Costura y la Moda como Christian Dior, Jean Paul Gaultier y Chanel y también a diseñadores que, aunque no cumplen los requisitos, tienen también un espacio para presentar sus colecciones.
París, la capital de la moda, esa es una frase más que dicha, que todos los amantes de las nuevas tendencias en el vestir conocen. Desde hace muchísimos años que los mayores eventos de moda a nivel mundial se dan cita en la capital francesa y la mayoría de los diseñadores de vestuarios más reconocidos van a ese territorio europeo para dar a conocer los nuevos diseño. París se ha caracterizado siempre por llevar la moda a lugares inesperados.
Desde el siglo XVIII, Francia floreció con el despliegue de la cultura, de las artes y la literatura, siempre destinadas a la monarquía y a las clases sociales más influyentes. Los reyes de Francia constituían uno de los reinados más fuertes de Europa en ese momento y gracias a ellos se le dio un importante papel a la cultura en la sociedad. Francia se expandía y su dominio también, la alta sociedad francesa gozaba de honores y placeres y contaba con mucho dinero, con millares de castillos y monumentos que aún hoy se conservan en toda la nación, pues fueron construidos la mayoría en esos tiempos. Los monarcas, por tanto, poseían una fortuna inmensa y también una inmensa ansia de entretenimiento y de lujo, algo que se tornó parte fundamental de la existencia de la alta clase francesa en esos tiempos.
En París se vio por primera vez la aparición de una marce de ropa, de un diseño específico que se le adjudicó a una persona. El primer diseñador de modas, quien le puso una etiqueta con su nombre a sus diseños, se trasladó a la capital francesa con motivo de vender esas piezas de su creación a la realeza y que supieran cómo contactarlo si decidían que deseaban nuevamente sus servicios.
La moda en ese momento era algo adjudicado a los reyes, la imponía la reina y a su vez, las mujeres de la corte, pues las prendas que ellas llevaban se copiaban y se convertía en diseños de moda para las damas de la aristocracia parisina. Así fue como todos aquellos que decidieron ponerle un nombre a sus ropas llegaban desde cualquier parte de Europa a la capital de Francia para intentar vender sus diseños y darlos a conocer, pues allí rápidamente se lograban las tendencias.
Hoy en día las firmas de ropa más reconocidas del mundo y los diseñadores más famosos eligen como destino París para lograr lanzar sus colecciones al estrellato, esperando que devengan tendencias de temporada y que por tanto, le otorguen millones de dólares. Por ello la capital francesa despliega casi todo el año especiales eventos y pasarelas de moda que ocupan importantes lugares y se llevan a cabo por todo lo alto.Las celebraciones y presentaciones de la llamada Alta Costura son habituales. Diseñadores como Christian Dior o Pierre Cardin tienen sus espacios habituales allí, aunque la ropa de alta costura es tan cara que pocas mujeres del mundo pueden darse el lujo de adquirirla.
Con el inicio de la temporada estival inicia la semana de la Alta Costura en París 2017, acontecimiento ya habitual en las tardes parisinas de comienzos del verano, que acoge a firmas miembros de la Federación de la Alta Costura y la Moda como Christian Dior, Jean Paul Gaultier y Chanel y también a diseñadores que, aunque no cumplen los requisitos, tienen también un espacio para presentar sus colecciones. El pasado domingo comenzó la semana de la alta costura parisina con más de treinta desfiles. Ya pusieron en alto sus habituales detalles excéntricos diseñadores de renombre como el italiano Giambattista Valli, que apostó por la seda como elemento clave de sus creaciones, convertida en pequeños vestidos y mini faldas.
