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martes, 8 de agosto de 2017

El curioso caso de Edgar Latulip

Por Elizabeth Almeida

El canadiense Edgar Latulip tenía apenas 21 años de edad cuando desapareció de un hogar para personas con discapacidad en la provincia de Ontario donde se encontraba recibiendo tratamiento.Una prueba de ADN confirmó su verdadera identidad y la verdad sorprendió hasta los más incrédulos que como Philip Gavin, agente de policía regional de Niágara, confesaban creer que casos como esos solo podían salir de la imaginación de algún guionista de televisión. De acuerdo con la información brindada por la Red Norteamericana de Personas Desaparecidas, Latulip, que ahora cuenta 50 años, tiene la edad mental de un niño de 12. La madre confesó que la relación con su hijo nunca había sido fácil aunque en los momentos que conoció que este había reaparecido solo quería verlo

La memoria del ser humano es una de sus posesiones de mayor valor. Es la que siempre nos recuerda quienes somos, nuestros objetivos en la vida, nuestros sueños y aspiraciones y todo el camino que hemos transitado para llegar a determinado momento de nuestra existencia. Por ello, los casos de pérdida de memoria han sido ley motives recurrentes en la cinematografía y la literatura de varios países en historias que reflejan de manera conmovedora, en la mayoría de los casos, el trabajo de una persona para recobrar su verdadero ser.

Pro también la vida real ha puesto a prueba a varias personas que se han visto despojadas de sus recuerdos más íntimos y cuyas familias y seres queridos han luchado por recuperar. N esta ocasión te proponemos que conozcas la historia de Edgar Latulip, quien luego de estar desaparecido durante 30 años logró encontrarse nuevamente con su familia y recuperar parte de sus memorias perdidas.

El canadiense Edgar Latulip tenía apenas 21 años de edad cuando desapareció de un hogar para personas con discapacidad en la provincia de Ontario donde se encontraba recibiendo tratamiento. La historia narra que se subió a un autobús para salir dl centro, pero poco después sufrió una lesión en la cabeza la cual, según afirma la policía, le provocó una severa pérdida de la memoria.

Latulip vivió en la región de Niágara con una identidad completamente diferente durante décadas antes de experimentar de manera repentina y violenta una invasión de numerosos recuerdos de su pasado. El hombre, sin dudas agobiado por la situación, le contó sus experiencias a un trabajador social quien se encargó de buscar el apellido Latulip y descubrió que este era objeto de una investigación como persona desaparecida hacía un tiempo en la región de Ontario.

Una prueba de ADN confirmó su verdadera identidad y la verdad sorprendió hasta los más incrédulos que como Philip Gavin, agente de policía regional de Niágara, confesaban creer que casos como esos solo podían salir de la imaginación de algún guionista de televisión. Sylvia Wilson, la madre de Latulip, quien reside en Ottawa, le confesó al diario Record que estaba realmente impresionada por la noticia. Sylvia contó que la última vez que vio a su hijo, el joven se recuperaba en el hospital al que fue llevado después de intentar suicidarse. Wilson confiesa que  estaba convencida de que a su hijo lo habían asesinado o se había suicidado como intentó hacer en aquella ocasión.

De acuerdo con la información brindada por la Red Norteamericana de Personas Desaparecidas, Latulip, que ahora cuenta 50 años, tiene la edad mental de un niño de 12. Su madre confesó que la relación con su hijo nunca había sido fácil aunque en los momentos que conoció que este había reaparecido solo quería verlo y ayudarlo a superar la dificultad de haber perdido una parte importante de sus recuerdos.

Duane Gingerich, oficial de policía regional de Waterloo, confirmó que hubo previos avistamientos de Latulip, el último de los cuáles ocurrido en el año 1993, le hizo sospechar a las autoridades que seguía con vida a pesar de las sospechas de que se hubiese quitado la vida.  El oficial confiesa que es un caso muy extraño lo ocurrido con Latulip ya que la mayoría de las personas que se declaran desaparecidas durante tanto tiempo, en el mejor de los casos solo se puede recuperar su cuerpo.

Las historias de personas que no pueden recordar quiénes son o de dónde vienen han capturado la imaginación y la atención de la gente por mucho tiempo. Antes del caso de Edgar Latulip, estuvo Benjaman Kyle, quién fue encontrado completamente desnudo en un estacionamiento de Burger King en el año 2004, afirmando no tener idea de cómo había llegado hasta allí. La búsqueda de su verdadera identidad se convirtió en una obsesión en los  Estados Unidos y muchas personas acompañaron fielmente este proceso. En Reino Unido, el caso más conocido es el del hombre piano, un misterioso alemán que fue encontrado en una playa con un talento musical virtuoso, y que al parecer no tenía memoria.