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martes, 22 de agosto de 2017

El humor como arma

Por Yamy

Es muy evidente el desafecto del realizador Michael Moore hacia el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Durante la campaña de Trump y posterior a la toma de posesión de su mandato, el irreverente Moore ha estado en constante movimiento en su contra. Ha organizado manifestaciones y pronunciado discursos, y ha liderado muchas más iniciativas para desairarlo y poner en claro ante las masas el carácter xenófobo del líder estadounidense. Esta vez dice utilizar la herramienta humorística como estandarte de la causa anti-Donald Trump.

Michael Moore es un conocido escritor y cineasta documentalista, popularizado por su postura progresista y su criticismo hacia la globalización, también hacia grandes corporaciones, la violencia armada, la invasión a Irak y otros países, y por demás hacia las políticas del gobierno de George W. Bush, sus antecesores, y por supuesto, últimamente hacia Trump. Es habitual que Moore sea catalogado como histérico y provocador incipiente, pero como todo en este mundo polarizado, su visión crítica es bastante aceptada y muchos son sus seguidores de lucha contra la desigualdad y el racismo que representa Trump.

Lo más reciente de su haber resulta su activismo callejero. Ha llevado su propio descontento a las calles como sucedió con la protesta que protagonizó a consecuencia de la reacción de Trump ante la violencia desatada en Charlottesville, Virginia, por los llamados nacionalistas blancos y otros grupos de derecha enfrentados a ciudadanos antifascistas. Hemos podido ver a un Michael Moore visiblemente indignado por la vaga respuesta de Donald Trump ante el suceso; criticó que el presidente catalogara como víctimas también a los segregacionistas, y que confundiera la Guerra de Secesión con la Revolución Americana.

Una de las posturas de Michael Moore para apoyar la causa anti-Donald Trump es el humor. Al respecto ha expresado la importancia decisiva del humorismo como arma efectiva no violenta, y ha convocado a todos a usar el sarcasmo y el sentido del humor para manifestarnos en contra de lo que está aconteciendo. Refiere que es una manera fácil de llegar a muchas personas y por tanto puede ser devastador. En tal sentido mencionó a un ejército extraoficial de comedia que se encuentra trabajando duro para ridiculizar al presidente de Estados Unidos; entre ellos están los comediantes Amy Schumer, Chris Rock, Alec Baldwin, Stephen Colbert y Melissa McCarthy.

Pero eso no es todo, además de sus continuos llamados, de sus alocuciones, y de su espectáculo “The Terms of My Surrender”, en Broadway, dedicado íntegramente a la causa Trump; Michael Moore promete hacer más, y utiliza todos los canales posibles, todas sus redes, todos sus empeños, porque como bien él dice, todo aporta.

Hace apenas unos días publicó en Facebook una imagen bastante simple, sin grandes textos ni hermosos gráficos. El título de la publicación es “Historia de los presidentes de los Estados Unidos”, y se trata de la representación de los 45 gobernantes de ese país utilizando un emoticono por cada uno. De modo que aparecen todos blancos y rubios, uno negro, y por último uno encapuchado de blanco al estilo de los integrantes del Ku Klux Klan. No hay más que decir. El resto ya lo inferimos. Y de eso se trata la convocatoria de Michael Moore.