La explosión de Alcanar evitó un atentado de mayor alcance en Barcelona
Como sabemos por todo lo tristemente ocurrido, el atentado terrorista de este jueves en Barcelona no fue un hecho único, sino parte de un plan de acción que incluía varias localidades y atentados. Al atropellamiento masivo en La Rambla, que hasta el momento ha causado 13 muertos y más de 100 heridos, se suma el atentado planificado en la localidad costera de Cambrils, donde la policía abatió a cinco terroristas esta madrugada, antes que lograsen llevara cabo una segunda matanza. Sin embargo, no se pudo impedir la muerte de una mujer ni tampoco se pueden dar por terminados los operativos.
El autor material del atentado en La Rambla no ha sido capturado aún y se desconoce si la célula yihadista que planeó los ataques tenía otras acciones entre sus planes inmediatos. Como parte de las investigaciones ha trascendido que la explosión en la madrugada del jueves en un chalé de Alcanar, Tarragona, está vinculada al grupo perpetrador de los ataques. A juzgar por lo descubierto, éste planeaba un gran atentado con artefactos explosivos en Barcelona. No obstante, el plan se vio frustrado y debió ser cambiado ante la explosión fortuita de unas bombonas de butano en la vivienda de Alcanar, que al parecer fungió como base de operaciones de los terroristas para planificarlo todo.
Según explicó el comisario jefe de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluís Trapero, “la explosión de Alcanar hizo que ya no contaran con el material necesario para preparar atentados de mayor alcance en Barcelona". En su opinión, es probable que la célula buscara “otro tipo de atentado", pero que ante el derrumbe parcial de sus planes se viesen obligados a improvisar y a actuar "de manera más rudimentaria". Por este motivo, la explosión en Alcanar y la consecuente pérdida del material explosivo que emplearían, sería por el cual los terroristas emprendieron atropellos masivos en La Rambla y en el paseo marítimo de Cambrils.
Trapero subrayó en sus declaraciones que la célula está integrada por "gente joven" y que preparaba sus ataques desde hacía "un cierto tiempo", probablemente "meses". Hasta el momento están detenidas cuatro personas por su vinculación con los hechos. Tres de ellas son de origen marroquí y una de español, nacido en Melilla. Todos estén pendientes de que se atrape al conductor de la furgoneta que invadió el paseo del corazón de Barcelona. Las fuerzas policiales creen que se trata de un menor de edad, de origen marroquí, por lo que su condena, de ser atrapado, no sería proporcional a la gravedad de los actos que cometió.